El periodista del motor británico condujo sobre las salinas de Utah el Octavia vRS «Salt espec», una unidad especialmente preparada del modelo 2.0 TSI de producción en serie que inicialmente estaba destinada a la flota de unidades de prensa de la marca checa en el Reino Unido.
De serie, pero con modificaciones
Inicialmente el reto era superar las 200 millas por hora (321,8 km/h) sobre las salinas de Bonneville en Utah, tradicional emplazamiento utilizado para alcanzar récords de alta velocidad. Para ello, la unidad «Salt espec» tuvo que ser especialmente preparada, aunque siempre bajo las estrictas regulaciones establecidas por la Asociación de Cronometraje del Sur de California
Así, se introdujeron importantes mejoras y modificaciones en el sistema de inyección para favorecer una mayor entrada de combustible al motor (ocho inyectores) y al sistema de refrigeración se le añadió un radiador de 10 litros de capacidad. Igualmente, el coche fue mejorado con la adopción de la transmisión de más amplias relaciones de marcha que se montaba en las unidades GreenLine del Octavia para favorecer alcanzar una velocidad máxima más alta, al tiempo que se elmiminaron los discos y pinzas de freno tradicionales sustituyéndolos por un paracaídas,para permitir que el Octavia pudiera detenerse de forma segura sobre la superficie de sal. La adopción del paracaídas, manejado con una palanca desde la cabina, permitía reducir el exceso de arrastre, el peso no suspendido y la fricción del coche, lo que facilitaba alcanzar una mayor velocidad sobre la pista.
Con apoyo de especialistas en tuning
Un equipo de la filial de Skoda desplazado directamente desde la sede de la marca en Milton Keynes, estuvo los días previos a la Speed Week de Bonneville, evento en el que se realizó el asalto al récord, sometiendo al Octavia vRS a un completo programa de pruebas con test dinamométricos, regulaciones del software de rendimiento y contando con el apoyo de REVO Technik, especialista en preparaciones de tuning.
Un objetivo inicial menos ambicioso
El objetivo inicial del equipo Skoda consistía en romper la barrera de las 200 millas por hora (321,8 km/h), un reto que el equipo se dio rápidamente cuenta de que podría ser superable tras las primeras carreras de competición celebradas con el coche. Sin embargo, alcanzar el récord de máxima velocidad registrado fue una auténtica sorpresa.
La carrera del récord establecida por el Octavia vRS consistió en dos sprints oficiales en el famoso circuito de las cinco millas de Bonneville. La primera pasada, celebrada el jueves 18 de agosto de 2011, estableció un registro de 22.513 mph (362,9279935 km/h), velocidad que se elevó hasta alcanzar en la segunda pasada las 228,647 mph (367,9716776 kmH) en el registro efectuado el viernes 19 de agosto. El registro superaba el récord de velocidad establecido para la categoría en nada menos que 11 segundos.
Logro relevante: el motor era nuevo
El logro tenía especial importancia, pues en aquel momento, el motor 2.0 TSI del Skoda Octavia era tan nuevo que apenas se habían producido unidades bajo especificaciones de competición o de alto rendimiento , razón por la cual la Asociación de Cronometraje del Sur de California permitió muy pocas modificaciones para afrontar el asalto al récord.
[video-embed=7265]900-537[/video-embed]
Una década después, y pese a los numerosos intentos efectuados para superar el récord, el registro de 227,080 mph (365,449836 km/h) validado por la Asociación de Cronometraje del Sur de California (SCTA) permanece vigente, sin que ningún otro modelo de producción en serie con motor de 2.0 litros sobrealimentado haya batido la marca lograda por la berlina checa.
Unidad restaurada y conservada
Para conmemorar el logro, la filial de Skoda en el Reino Unido ha restaurado por completo el Octavia RS de 2011 devolviéndolo a la misma especificación que logró completar el recorrido final sobre las salinas de Bonneville. Para comprobarlo, la nueva unidad fue puesta a prueba las pistas de alta velocidad de Millbrook Proving Ground (UK) junto con una amplia selección de algunos de los modelos de mayor rendimiento de la marca checa, tanto pasados como de su actual gama. Un evento que sirvió igualmente para celebrar el 20 aniversario de la comercialización de los Skoda vRS en el Reino Unido.
Actualmente, el Skoda vRS Bonneville Special forma parte de la colección de modelos de Skoda en el Reino Unido, en la que se pueden encontrar unidades de modelos de la marca checa comercializados en el mercado británico desde 1929.