El especialista americano Singer se ha vuelto a superar con sus nuevos Porsche 911, recordemos todos ellos toman la base de la generación 964 y mantienen sus incombustibles propulsores bóxer atmosféricos y refrigerados por aire, sólo que las mecánicas originales dejan paso a modernizados propulsores firmados por los especialistas de Cosworth y que vienen equipados con transmisiones manuales de 6 velocidades.
Sus dos nuevas creaciones
Como viene siendo tradición, los especialistas de Singer siguen denominando a sus nuevas criaturas con el nombre de la localidad a donde van a ir a parar, de forma que ahora estamos ante los nuevos Singer Luxemburgo y Singer Minnesota.
Comenzaremos por este Porsche 911 Targa, un deportivo que ha pasado a llamarse Singer Luxemburgo y que apuesta por una carrocería rediseñada y fabricada como la de todos los Singer, en fibra de carbono. Estrena faros Full LED y detalles estéticos que le aportan un toque moderno, pero sin perder su clasicismo, otorgado por detalles como las llantas Fuchs de 17 pulgadas. Para el exterior de este ejemplar se ha apostado por una pintura especial en la que se emplea níquel y que aporta este tono anaranjado tan especial.
Como buen 911 Targa, este ejemplar cuenta con su inconfundible techo de lona, el cual se puede desmontar a mano. Pero para aportar una mayor privacidad y también un mayor aislamiento del exterior, Singer ha creado para él un nuevo techo rígido que ha sido fabricado en fibra de carbono para contener el peso.
Con un nuevo bóxer fabricado por Cosworth
Su habitáculo es sumamente especial, pues los deportivos asientos se han tapizado en un tejido tartán denominado Tyler y en el que se emplean dos tonos de naranja, cuatro tonos de azul y uno de color crema para dar este llamativo aspecto y que se combina con cuero azul. Su propietario ha apostado por la mecánica más potente de todas las que Singer ofrece, un 4.0 de seis cilindros horizontales, capaz de proporcionar 390 CV de potencia.
Para finalizar nos fijamos en los Singer 911 Minnesota, que toman como punto de partida un Porsche 911 964 Coupé del año 1994 (el Targa es de 1990). El exterior se pinta en un exclusivo tono gris, donde destaca su alerón trasero móvil o las llantas Fuchs. El interior es más discreto que el del Luxemburgo, apostando por unos asientos Recaro eléctricos y tapizados en marrón tabaco. Su cliente ha elegido un tacómetro en un color azul especial, pues todos los Singer que se han fabricado siempre han llevado un cuentavueltas en color naranja, una seña de identidad.
Su propulsor, también bóxer y con seis cilindros, tiene 3.8 litros de cubicaje y eroga una potencia de 350 CV, suficientes para disfrutar con este deportivo cuyo chasis también se ha reforzado incorporando una jaula de seguridad interior.
Ambas unidades estarán expuestas junto a otros ocho ejemplares fabricados por Singer en Pebble Beach. Precisamente Pebble Beach será el escenario para entregarlos a sus afortunados clientes.