Cada vez que pasamos la Inspección Técnica de Vehículos (ITV), recibimos una pequeña pegatina que debemos colocar en el parabrisas del coche. Aunque a muchos conductores les parece un mero trámite, esta etiqueta tiene más importancia de la que parece. Más allá de indicar que el vehículo ha superado favorablemente la inspección, su color también transmite información clave.
Las pegatinas de la ITV cambian de color cada año, y esta variación no es aleatoria. Los tonos que se utilizan —rojo, verde o amarillo— permiten a las autoridades y a los conductores identificar de un vistazo en qué año vence la inspección del vehículo. Si alguna vez te has preguntado por qué este pequeño adhesivo cambia de color o qué significa exactamente, aquí te lo explicamos con detalle.
4Sanciones por llevar una pegatina caducada

Circular con una pegatina de ITV caducada, manipulada o falsa no es un asunto menor. La normativa es clara: llevar la ITV fuera de plazo conlleva una multa de 200 euros, aunque no supone la pérdida de puntos del carnet de conducir. En casos más graves, como falsificación o intento de engaño, las sanciones pueden ser incluso mayores y derivar en infracciones penales.
Además, si tu vehículo no ha pasado la ITV y sufres un accidente, el seguro podría negarse a cubrir los daños, especialmente si la falta de inspección técnica tiene relación con el siniestro. Por tanto, cumplir con la ITV es una cuestión tanto de legalidad como de seguridad y responsabilidad.