El Rolls-Royce Phantom IV es un modelo de automóvil de lujo con una historia que se remonta a mediados del siglo XX. Se fabricaron solo 18 unidades en todo el mundo, lo que lo convierte en un automóvil extremadamente raro y exclusivo. Este vehículo, con su elegancia y prestigio, ha sido la elección de diversas autoridades y jefes de estado a lo largo de los años.
La historia del Phantom IV se remonta a la década de 1950. Fue adquirido por Francisco Franco en 1952, junto con otros dos modelos similares. Estos tres automóviles forman parte de una colección de coches antiguos que se encuentra en la Sala Histórica de la Guardia Real en El Pardo. Cada uno de ellos tiene una matrícula del Ejército de Tierra, que es el propietario de estos lujosos Rolls-Royce. Además, se dice que cuatro modelos Phantom similares fueron adquiridos por la Casa Real Británica y uno por el Sha de Persia, Reza Palevi.
3Bien conocido por Felipe VI
Otra ocasión en la que el Phantom IV fue el centro de atención fue el día de la proclamación de Felipe VI como rey de España, el 19 de junio de 2014. El automóvil histórico desempeñó un papel importante en esta ceremonia institucional.
Además, estos tres modelos de Rolls-Royce Phantom IV a menudo son elegidos por los monarcas españoles para el desfile militar que tiene lugar el 12 de octubre de cada año, Día de la Fiesta Nacional. La presencia de estos automóviles históricos en eventos de importancia nacional destaca su relevancia en la cultura y la historia de España.
El Rolls-Royce Phantom IV no es solo un vehículo de lujo, sino también un símbolo de elegancia y tradición. Su participación en eventos reales y ceremonias importantes subraya su importancia en la vida institucional de España y su relevancia en el patrimonio automovilístico del país.