La última maravilla de los especialistas de Ringbrothers lleva el nombre de 'CAPTIV' y nace de la base de un sensacional Dodge Charger de 1969. Además, este proyecto ha nacido al otro lado del océano, más concretamente en Nueva Zelanda, porque ha sido un encargo especial del piloto Greg Murphy, nacido en Kiwi y ganador de 22 carreras de la serie V8 SuperTourer y de 28 carreras en el Supercars Championship.
De echo a los especialistas de Ringbrothers este Dodge Charger ya les llegó absolutamente desmontado, trabajo que comenzó en Nueva Zelanda. Ya en su cuartel general de Wisconsin la carrocería fue debidamente tratada y restaurada. Además que sus paneles laterales se adaptaron para instalar un artesanal sistema de escape fabricado por los chicos de Flowmaster. Una vez dejada mejor que cuando salió de fábrica, se pintó de forma artesanal en color Pile Up Yellow, además de que se instalaron unas exclusivas llantas HRE de 19 pulgadas en el eje delantero y de 20 pulgadas en el eje trasero, las cuales han calzado con neumáticos Michelin Pilot Sport 4S.
Esconde un Hellcat bajo su capó
Como no podía ser de otra manera y conociendo las maneras de trabajar de Ringbrothers, no es de extrañar que bajo su capó delantero hayan colocado un todopoderoso Hellcat. Hablamos de un 6.2 V8 Supercharged que genera 717 CV de potencia y que en esta ocasión se acompaña de un cambio manual de 6 velocidades firmado por Tremec, que está conectado a una barra de transmisión en fibra de carbono que envía todo el potencial al eje posterior. Para detener con solvencia semejante maravilla, Ringbrothers también se ha decantado por un potente equipo de frenos Baer, donde delante hay pinzas de seis pistones.
El interior tampoco se queda atrás, porque hasta el último rincón ha sido actualizado, restaurado y mejorado por Ringbrothers. Además de exclusivos asientos Recargo, este Charger también luce un volante especial fabricado por ellos mismos combinando fibra de carbono y aluminio billet, el cual también contempla elementos, como el botón del claxon impreso en 3D. Tras él se ha colocado un cuadro de instrumentos digital, además de que este 'CAPTIV' luce un sistema de iluminación ambiental, mandos creados a su medida, un potente equipo de sonido… Todo lo necesario para disfrutar de esta auténtica maravilla.