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Consejos vitales antes de quedarte varado: ¿Cómo el frío impacta en baterías de coches eléctricos?

El invierno ha llegado a la Península Ibérica, trayendo consigo no solo la magia de la temporada, sino también temperaturas frías que afectan de manera particular a los vehículos eléctricos.

A diferencia de los automóviles convencionales, los coches eléctricos enfrentan desafíos específicos debido a sus baterías sensibles al frío. En este artículo, exploraremos cómo el invierno impacta la autonomía de los coches eléctricos y ofreceremos valiosos consejos para maximizar su rendimiento.

El frío y las baterías de los coches eléctricos

El corazón de un coche eléctrico es su batería, y las bajas temperaturas pueden afectar significativamente su desempeño. Estos vehículos dependen de baterías de ion de litio, y cuando el termómetro desciende, la capacidad de estas baterías para proporcionar energía disminuye. Según los fabricantes, en condiciones de frío intenso, la autonomía puede reducirse entre un 15% y un 25%, comparada con condiciones más templadas.

La temperatura óptima para el rendimiento de las baterías de coches eléctricos se sitúa entre 20 y 35 grados Celsius. A partir de -10ºC, la pérdida de autonomía comienza a manifestarse de manera más notoria.

Combatir el frío para maximizar la autonomía

1. Preacondicionar el habitáculo

En lugar de encender la calefacción al ingresar al coche, en los vehículos eléctricos es recomendable preacondicionar el habitáculo mientras está enchufado. Programar el preacondicionamiento o preclimatización permite calentar el interior a una temperatura confortable.

Esto no solo mejora la comodidad al entrar al coche, sino que también contribuye a deshielar los cristales, evitando la necesidad de encender la calefacción al arrancar y, por ende, preservando la autonomía.

2. Utilizar los sistemas específicos

Cuando el coche está desconectado de la carga, la batería suministra la energía necesaria. Para minimizar el consumo de energía en climatización, aprovecha los sistemas específicos de los vehículos eléctricos, como la calefacción de los asientos o el volante calefactable.

Estas opciones consumen menos energía (alrededor de 75 vatios) en comparación con la calefacción del habitáculo completo, que puede oscilar entre 3,000 y 5,000 vatios. Alternar entre estas opciones puede optimizar la eficiencia energética.

3. Utilizar el programa Eco

La mayoría de los coches eléctricos ofrecen programas de conducción, incluido el modo ecológico o eficiente. Este programa reduce el consumo de energía y aumenta la autonomía al limitar el uso de sistemas como la climatización.

Además, puede disminuir la potencia del motor y proporcionar una aceleración más progresiva, lo que es particularmente beneficioso en condiciones invernales.

4. Conducir de manera tranquila y prudente

El estilo de conducción influye significativamente en la autonomía. Evita acelerones bruscos, frenadas excesivas y exceder los límites de velocidad. Una conducción suave, progresiva y fluida permite a los coches eléctricos recuperar parte de la energía cinética durante las deceleraciones, mejorando la eficiencia general.

5. Mantener la presión de los neumáticos

Las bajas temperaturas también afectan la presión de los neumáticos. Una presión insuficiente aumenta la resistencia a la rodadura y reduce la autonomía. Verifica y ajusta regularmente la presión de los neumáticos para garantizar que estén inflados correctamente, optimizando así la eficiencia y la distancia que puede recorrer el coche con una carga completa.

Toyota coches electricos 5 Motor16

Mantenimiento adicional para una conducción sin sorpresas en invierno

Aunque los consejos anteriores son fundamentales para optimizar la autonomía de los coches eléctricos durante el invierno, también es esencial prestar atención a otros aspectos del vehículo para garantizar un rendimiento sin problemas en esta estación.

1. Revisión del sistema de frenos y neumáticos

En invierno, las condiciones del pavimento pueden volverse resbaladizas debido a la presencia de hielo o nieve. Por lo tanto, es crucial asegurarse de que los frenos estén en condiciones óptimas y que los neumáticos tengan un dibujo adecuado para garantizar un agarre seguro.

Reemplazar las pastillas de freno desgastadas y verificar la presión de los neumáticos regularmente son pasos esenciales para mantener la seguridad y el rendimiento del vehículo.

2. Inspección del sistema de iluminación

Los días más cortos y las condiciones de luz reducida en invierno hacen que la iluminación del vehículo sea aún más crucial. Asegúrate de que todas las luces exteriores, incluidos faros, luces traseras y luces de freno, estén en buen estado de funcionamiento.

Reemplaza cualquier bombilla fundida y asegúrate de que los faros estén correctamente alineados para garantizar una visibilidad óptima durante las noches oscuras.

3. Verificación del sistema de limpiaparabrisas y nivel de anticongelante

La visibilidad durante las condiciones climáticas invernales puede verse comprometida, por lo que es esencial garantizar que el sistema de limpiaparabrisas funcione correctamente. Reemplaza las escobillas desgastadas y utiliza un líquido limpiaparabrisas de invierno para evitar que se congelen las tuberías.

Además, verifica el nivel de anticongelante y asegúrate de que esté en la proporción correcta para prevenir daños a las tuberías del sistema de refrigeración.

4. Carga y almacenamiento de la batería

Las bajas temperaturas pueden afectar negativamente la capacidad de la batería, por lo que es crucial mantenerla en óptimas condiciones. Si es posible, estaciona el coche en un lugar cálido o utiliza una manta térmica para proteger la batería durante la noche.

Además, evita dejar el vehículo inactivo durante períodos prolongados sin conducir, ya que esto puede agotar la batería más rápidamente.

5. Control del sistema de calefacción y aire acondicionado

Un sistema de calefacción eficiente no solo contribuye al confort del conductor y los pasajeros, sino que también puede influir en la autonomía del vehículo. Asegúrate de que el sistema de calefacción y aire acondicionado funcione correctamente, ya que un uso eficiente de estos sistemas puede ayudar a mantener la temperatura interna sin afectar gravemente la autonomía.

6. Actualización del software del vehículo

Los fabricantes de coches eléctricos suelen lanzar actualizaciones de software para mejorar el rendimiento y la eficiencia de la batería. Verifica si hay actualizaciones disponibles y asegúrate de que el software del vehículo esté actualizado.

Estas actualizaciones pueden abordar problemas específicos relacionados con el rendimiento invernal y garantizar un funcionamiento óptimo del vehículo.

Así concluimos

En resumen, maximizar la autonomía de un coche eléctrico en invierno va más allá de simplemente adoptar prácticas de conducción eficientes. Un mantenimiento adecuado del vehículo, atención a los sistemas clave y precauciones adicionales son esenciales para garantizar un rendimiento óptimo durante la temporada invernal.

Con estos consejos, los propietarios de coches eléctricos pueden enfrentar los desafíos del invierno con confianza, disfrutando de una conducción segura y eficiente.