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domingo, 21 septiembre 2025

Porsche 911 S/T o la leyenda en amarillo que une dos generaciones

De la gloria en Le Mans a la oscuridad de un granero en San Francisco, y de ahí a la resurrección en manos expertas: la historia del Porsche 911 S/T de 1972 es la de una segunda vida. Hoy, junto a la reinterpretación moderna de 2024 en idéntico color amarillo Light, se convierte en un relato que une pasado y presente bajo un mismo símbolo.

El Porsche 911 S/T es uno de esos automóviles que trascienden su condición de máquina para convertirse en mito. En 1972, un ejemplar pintado en amarillo Light —código 117— conquistaba la categoría GT en las legendarias 24 Horas de Le Mans. Su sonido bóxer, su fiabilidad y su ligereza lo situaban como uno de los grandes referentes de la resistencia. Sin embargo, el destino le tenía preparado un giro inesperado: apenas tres años después desaparecía de las pistas y, tras pasar por varias manos, terminaba olvidado y en estado ruinoso en un granero de San Francisco.

Del olvido a la resurrección

Porsche 911 6 Motor16
Foto: Porsche.

Los registros señalan que la última aparición en carrera de este 911 S/T se remonta a mayo de 1975, en Riverdale, con Don Lindley al volante. Después, su rastro se diluye entre nuevos propietarios hasta que, en 2008, surgen rumores de un hallazgo singular. No sería hasta 2013 cuando un coleccionista suizo decide viajar a California para comprobarlo con sus propios ojos. Lo que encuentra es un amasijo de chapa oxidada, abolladuras y pintura descuidada: la antítesis de aquel campeón de Le Mans.

La tarea de devolverlo a la vida recae en los especialistas de Porsche Classic, en Stuttgart. Allí, el coche es completamente desmontado y despojado de su maltrecha pintura. Enderezar el chasis en bancada, fabricar piezas inexistentes y trabajar más de mil horas sobre la carrocería fueron solo algunos de los pasos de un proceso que se prolongó dos años y medio.

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La restauración se completó con técnicas modernas, como la inmersión catódica anticorrosión, pero sin traicionar la esencia original. El resultado, entregado en 2016, devolvía al mundo un Porsche 911 S/T en estado impecable, vestido otra vez en su amarillo Light con dorsal 41, como en 1972.

Una reinterpretación del Porsche 911 S/T para el siglo XXI

Porsche 911 7 Motor16

Foto: Porsche.

El relato no termina ahí. El mismo coleccionista quiso que su garaje acogiera también una versión contemporánea de esa leyenda. Porsche aceptó el reto a través de su división Sonderwunsch, especializada en encargos únicos. Así nació un nuevo 911 S/T de 2024, vestido con el mismo color amarillo Light, una tonalidad que llevaba décadas fuera de la paleta oficial.

El proceso no fue sencillo. Ese tono ofrece escasa capacidad de recubrimiento, lo que exige precisión artesanal, especialmente al aplicarse sobre piezas de carbono. Sin embargo, el resultado fue tan fiel como espectacular. Llantas de magnesio forjado en plata oscura, pinzas de freno negras e interior sobrio completan el conjunto.

Bajo la carrocería, late el motor bóxer atmosférico de 6 cilindros y 4 litros, con 525 CV y un régimen máximo de 9.000 rpm, asociado a una caja manual de seis marchas. Con un peso en vacío de apenas 1.380 kilos, mantiene la filosofía de ligereza y pureza que distinguió a su antepasado, aunque con toda la sofisticación técnica de la ingeniería actual.

El valor de Sonderwunsch

Porsche 911 2 Motor16
Foto: Porsche.

El caso de los dos Porsche 911 S/T —el original restaurado y el reinterpretado— ejemplifica la misión de Sonderwunsch: preservar el legado y, al mismo tiempo, abrir caminos nuevos. Esta división convierte en realidad los sueños más ambiciosos de los clientes, siempre con los mismos estándares de calidad que los modelos de serie. En Stuttgart no existen concesiones: cada vehículo sale de fábrica con garantía completa, como si se tratara de un modelo recién concebido. Por eso son tan valorados por los coleccionistas y codiciados en las subastas (aquí más información).

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La historia del 911 S/T en amarillo Light es, en definitiva, una metáfora de la marca alemana como marca: respeto absoluto por sus raíces y la valentía de reinventarse en cada generación. En el garaje de un apasionado suizo conviven hoy dos piezas únicas que dialogan entre sí: una, testigo de un tiempo en que Le Mans era el centro del mundo; otra, fruto de la precisión contemporánea que asegura que las leyendas nunca mueran.

Fotos: Porsche.

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