La llegada de los peajes digitales, ese sistema sin barreras que permite circular sin detenerse, supone una gran comodidad. Las cámaras registran la matrícula y el pago se procesa automáticamente.
Pero esta innovación también ha abierto la puerta a un nuevo tipo de estafa: el phishing camuflado bajo falsas reclamaciones de peaje. En cuestión de segundos, podrías compartir tus datos bancarios y encontrarte con cargos inesperados.
3Alertas que ya se están emitiendo

Las empresas gestoras de los peajes digitales han tenido que advertir a los conductores: no se paga nunca mediante enlaces recibidos por correo o SMS, sino únicamente en sus páginas oficiales. Usan canales como email corporativo y comunicación en sus apps para distinguir qué notificaciones son legítimas.
Además, han publicado listados con los remitentes reconocidos y animan a desconfiar de mensajes que pidan pagos inmediatos o amenacen con cargos extra. Si dudas, recomiendan contactar directamente con el servicio oficial desde la web principal, no usando enlaces del mensaje recibido.