Han tenido que pasar 8 años para que Opel se haya decidido por fin a renovar su Insignia, una berlina que a pesar del paso de los años sigue dando alegrías a la marca, con unas ventas que solo en España y en lo que va de año sitúan al modelo alemán en una sorprendente quinta posición de su segmento. Pero la llegada de nuevos actores ha metido mucha presión a un modelo que ya mostraba muchas carencias. Y ha llegado el momento.
El nuevo Insignia, que como novedad recibe la denominación adicional Grand Sport, recurre a una arquitectura completamente nueva y a una carrocería que pasa de 4.842 a 4.897 milímetros convirtiéndose en el modelo de mayor longitud de su segmento por delante incluso del Ford Mondeo y sus 4,87 metros. La berlina alemana también ha crecido 9 centímetros en su distancia entre ejes y la anchura de vías es 11 milímetros mayor, aunque por el contrario el techo es 29 milímetros más bajo. Este aumento de tamaño no ha ido aparejado a un aumento de peso gracias a la utilización de una nueva generación de aceros prensados endurecidos y a un concienzudo trabajo de disminución de peso de muchos componentes. Por eso el Insignia de nueva generación marca en la báscula hasta 175 kilos menos, un logro importante que no obstante pierde un poco de mérito debido lo relativamente fácil que resulta hoy en día reducir el elevadísimo peso del Insignia actual.
Un estilo más deportivo
Las nuevas proporciones le sientan bien porque ahora resulta más estilizado y más deportivo. Y ganando espacio interior que siempre es bienvenido, como por ejemplo los 32 mm más de anchura en las plazas traseras o los 25 mm más de espacio detrás para las rodillas. Sin embargo la estilización de la silueta tiene sus daños colaterales ya que la altura detrás sigue siendo justita, como en el actual, y el maletero pierde 40 litros al pasar de 530 a 490 litros, una cifra que, siendo buena, no brilla demasiado si la comparamos con la de algunos de sus rivales, como los 550 litros del Mondeo o los 586 del Passat.
El puesto de conducción se sitúa tres centímetros más bajo que en el modelo anterior, lo que quiere decir que Opel va buscando que el conductor experimente un tipo de conducción más deportiva. Desde luego, motores y tecnología para practicarla no le van a faltar. Como el nuevo motor 2.0 T de 250 caballos de gasolina con un nuevo sistema de tracción total con tecnología de doble embrague Twin Clutch Concept que reparten el par entre las ruedas traseras de forma variable de una a otra por medio de un embrague para cada una de ellas. Se trata de dos embragues multidisco, controlados eléctricamente, que reemplazan al diferencial trasero. El nuevo Insignia también contará con reparto vectorial del par y con una caja de cambios automática de ocho velocidades, que será de serie en el motor más potente y asociada siempre a la tracción total. Otro motor novedoso es el 1.5 T de 165 caballos que sustituye al 1.6 T de 170 caballos. Y el abanico de potencias de la gama estará entre los 140 y los 250 en gasolina y entre los 110 y los 170 en diésel.
El Insignia Grand Sport estrena el evolucionado chasis FlexRide que adapta la amortiguación, la dirección, la respuesta del acelerador y el régimen de cambio en los coches automáticos de forma independiente o a través de los modos «normal», «sport» y «tour» seleccionables desde el «Drive mode», corazón de este chasis.
Además de los nuevos faros, el nuevo Insignia ofrece un importante paquete de ayudas a la conducción como la pantalla HUD que proyecta una serie de datos en el parabrisas; la cámara de visión 360º, el control de crucero adaptativo con frenada autónoma de emergencia, la alerta de cambio involuntario de carril o la alerta de tráfico transversal trasero. A todo ello hay que sumarle la última generación de sistemas multimedia IntelliLink y los servicios Opel OnStar.
En el nuevo Insignia Grand Sport desaparece la versión de 4 puertas y poco a poco irán llegando más carrocerías. Como la Sports Tourer, que aparecerá en julio o la de aspecto todocamino denominada Country Tourer que estará disponible en octubre.
Opel Insignia actual. Toda una referencia
El nuevo Insignia se comienza a vender el próximo mes de mayo, pero hasta entonces el actual todavía tiene mucho que decir. La primera generación cuenta con una gama de 39 versiones a partir de 5 modelos: 4 y 5 puertas, Country Tourer, OPC y Sports Tourer. Los de 4 y 5 puertas serán relevados por el nuevo Grand Sport, pero el resto seguirá en cartera hasta que lleguen las nuevas versiones. La primera generación se vende desde 25.000 euros.
Intellilux Led. Hasta 400 metros de luz
Con un total de 16 LEDs por faro -8 en el Astra- los nuevos faros Intellilux del Insignia Grand Sport prometen posicionar a la nueva berlina alemana en el grupo de los grandes a nivel de tecnología lumínica. Este sistema permite circular por carretera con las luces largas conectadas sin deslumbrar al resto de los usuarios y lo consigue a base de apagar LEDs selectivamente enmascarando la silueta de los vehículos gracias a la cámara Opel Eye. Según contaba nuestro compañero Alberto Mallo, que ha podido probar estos nuevos faros, el resultado es mejor que el obtenido en el Opel Astra, con una precisión mucho mayor. Además, el Intellilux LED de Opel dispone de luces direccionales para ampliar el haz en los giros hasta 70 km/h.