Imagina por un momento que tu coche, un modesto Opel Astra, figura en una multa por circular a casi 700 km/h. Suena surrealista, ¿verdad? Pues es exactamente lo que le ocurrió a un conductor en Bélgica. Según el radar, conducía a 696 km/h. La noticia no tardó en recorrer Europa, y en España no ha dejado indiferente ni a la Guardia Civil.
Aunque parezca sacado de una película, la historia tiene algo de verdad, mucho de error y bastante de anécdota. Y sí, por supuesto, ha despertado el interés de la Benemérita: no solo por la velocidad en sí, sino por cómo los fallos pueden influir en el sistema de multas. ¿Qué pasó exactamente? Vamos a verlo.
2El origen del supersónico error

El suceso tuvo lugar en una carretera urbana de Bélgica. Según el medio Autozeitung, el radar fijo que controlaba la velocidad cazó al Opel Astra a casi 700 km/h. La cifra quedó registrada en la multa que recibió el conductor, de nada menos que 6.597 €. Pero algo no cuadraba.
Tras revisar el sistema, las autoridades belgas confirmaron que hubo un fallo de calibración del radar. Al parecer, un error de conversión o de lectura multiplicaron por más de diez la velocidad real. De ahí que se generase esa cifra absurda y la respectiva multa desproporcionada.