El Jeep Compass recibe un nuevo impulso gracias a la introducción de una renovada gama de motores de gasolina, a un ajuste más dinámico del chasis y a mejoras en la dotación multimedia. Además, se reducen considerablemente los plazos de entrega debido a que este modelo ya se fabrica en Italia, limitándose el tiempo respecto a las unidades que hasta ahora llegaban desde México.
Incrustado de lleno en el competitivo segmento C-SUV, el Compass 'jubila' al conocido bloque 1.4 MultiAir de gasolina, con 140 y 170 CV, por un nuevo cuatro cilindros de 1.3 litros litros, turboalimentado, construido en aluminio y que eroga 130 CV con cambio manual de seis relaciones, y 150 CV si se asocia a una transmisión automática DDCT con doble embrague y el mismo números de velocidades. Sobre la 'mesa' las ventajas son evidentes, ya que reduce el consumo y las emisiones en torno a un 30 por ciento respecto a la apuesta anterior. Ambas nuevas variantes incorporan un filtro de partículas y comparten valor de par máximo, con unos generosos 270 Nm. También incorporan la tecnología MultiAir III, que mejora la eficiencia gracias al ajuste y sincronización de las válvulas.
Tracción total sólo en los plug-in
Estas dos nuevas variantes de gasolina, así como la versión turbodiésel 1.6 Multijet de 120 CV, sólo están disponibles con tracción delantera. Estarán a la venta desde el mes de julio. Si queremos disfrutar de tracción total habrá que esperar al lanzamiento de las eficientes variantes híbridas enchufables 4xe, que debutarán en la segunda mitad del año con 190 y 240 CV. A diferencia del Renegade, el Compass prescinde del bloque de acceso 1.0 tricilíndrico.
Otra novedad es la incorporación de un modo de conducción Sport asociado a la variante 1.3 de 150 CV. Al accionar el mando ubicado en la consola central se consigue una respuesta más rápida y directa de la dirección, del cambio y del acelerador. Precisamente al levantar el pie del acelerador, la transmisión automática evita subir de marcha para poder disfrutar de una retención del motor más contundente. Otro atractivo extra es que el Compass fabricado en Italia se ha puesto a punto en el circuito de Balocco, reduciéndose los balanceos de la carrocería gracias a un ajuste más fino de la dirección y al montaje de unos nuevos amortiguadores más sofisticados.
Asimismo hay que destacar la mejora en la conectividad del vehículo, dentro y fuera de él, gracias a las nuevas soluciones del sistema Uconnect Services. De esta manera, y dependiendo del nivel de acabado, contempla funciones de aviso de emergencia en caso de accidente, asistencia en carretera, localización del vehículo, el estado de salud de nuestro Compass desde el smartphone…
Asistentes de conducción
Para concluir, señalar que este modelo hace gala de un completa dotación en materia de asistentes de seguridad. De serie en toda la gama contempla alerta de cambio de carril involuntario y un aviso de colisión frontal. El equipamiento se completa con elementos como un control del ángulo muerto, una alerta de tráfico cruzado en la zaga, un control de crucero adaptativo, un sistema de aparcamiento automatizado o una práctica cámara trasera.
Muchas pequeñas pincelas para impulsar al Compass más europeo, aunque alguno echará de menos alguna variante dotada de tracción total sin necesidad de tener que adquirir una variante plug-in.