Los Gran Turismo biplaza con motor V12 en posición central-delantera son parte del ADN de Ferrari, tanto como sus admirados deportivos con V8 central-trasero. Esta configuración lleva en la gama de manera ininterrumpida desde 1996, tras 23 años fuera de la oferta de la marca del cavallino. De hecho, el último modelo antes del parón fue uno de sus grandes iconos: el 365 GTB/4, conocido de manera popular como ‘Daytona’, en el cual se han inspirado los diseñadores de Ferrari para su última creación: el 12Cilindri.
Antes de entrar en materia, hagamos un repaso de esta saga. El 550 Maranello de 1996 ponía fin a más de dos décadas de ausencia de un Ferrari biplaza con motor V12 central-delantero. En 2002 tuvo continuación con el 575M Maranello, básicamente el mismo coche, aunque con mayor potencia (515 CV frente a 485 CV). En 2007 llegó un modelo completamente nuevo, el 599 GTB Fiorano que elevó la potencia hasta 620 CV. En 2012 fue relevado por el F12berlinetta, que se fue hasta los 740 CV, mientras que su sustituto y antecesor del 12Cilindri, el 812 Superfast, llevó el V12 hasta los 6.5 litros de cilindrada y 800 CV.
El nuevo Ferrari 12Cilindri conserva el bloque F140HD, un 6.5 V12 de aspiración atmosférica, que alcanza los 830 CV a 9.250 revoluciones por minuto y un par máximo de 678 Nm a 7.250 vueltas. Toda esta fuerza se envía al eje trasero que, por cierto, equipa una medida de neumáticos novedosa en la marca: 315/35 R21 (delante, 275/35 R21), que pueden ser Michelin Pilot Sport S5 oy Goodyear Eagle F1 Supersport, ambos desarrollados para la empresa de Maranello. De dicho envío se encarga una caja de cambios automatizada de doble embrague y ocho velocidades (siete relaciones en el 812 Superfast), también empleada en el SF90 Stradale.
El nuevo Ferrari 12Cilindri redefine la línea estilística de sus antecesores
En lo que respecta al diseño, el objetivo de Flavio Manzoni y los diseñadores del Centro Stile Ferrari que dirige, pretendía llevar a cabo con el Ferrari 12Cilindri una radical transformación de los códigos estilísticos de los anteriores V12 con motor delantero de Ferrari. De esta forma, el frontal pierde algunos rasgos característicos, como los faros en forma de ojo, y los reemplaza por un conjunto más homogéneo inspirado claramente en el Daytona.
La trasera también adopta un estilo totalmente novedoso, y en lugar de un alerón trasero tradicional, se ha optado por utilizar dos apéndices activos que, integrados con la luneta trasera, producen un efecto con un tema delta característico. No obstante, el mayor cambios está en la trasera, donde dicen adiós los tradicionales pilotos circulares que han acompañado a esta saga durante prácticamente toda su existencia.
En lo que respecta al interior, el diseño se divide en tres niveles diferentes: el primero, dominado por la parte superior del salpicadero, continúa hasta fundirse con el revestimiento del panel de las puertas. El siguiente es la zona central, mientras que el tercero incluye los huecos para los pies y los asientos. Cada nivel está claramente definido, acentuando el efecto de doble cabina mediante las combinaciones de colores y materiales. Se utilizan para crear un aspecto elegante o deportivo para los asientos y otros elementos.
La calidad de vida a bordo ha sido uno de los principales motores para el desarrollo del confort interior. Teniendo esto en cuenta, se ha introducido un nuevo techo de cristal tintado de generosas dimensiones, que mejora significativamente la luminosidad en el interior de la cabina y, por tanto, la sensación de espacio a bordo, garantizando una eficiencia térmica óptima tanto en verano como en invierno.
El Ferrari 12Cilindri también introduce una nueva lógica de interfaz hombre-máquina (HMI) compuesta por tres pantallas que elevan la experiencia del cockpit del Ferrari V12 berlinetta a una dimensión completamente nueva. La pantalla táctil capacitiva central de 10,25″ permite al conductor y al pasajero controlar todas las funciones principales. A ella se suma la pantalla del conductor de 15,6″, que contiene información sobre la conducción y la dinámica del vehículo. Por último, el pasajero participa plenamente en la experiencia de conducción gracias a una pantalla de 8,8 pulgadas que le permite sentirse como un auténtico copiloto.
Un chasis optimizado con menos distancia entre ejes
El chasis del 12Cilindri, completamente nuevo, se caracteriza por una batalla 20 milímetros más corta que la del 812 Superfast, si bien la distancia total del coche ha aumentado a 4,73 metros (4,68 metros en su antecesor). Se ha prestado especial atención a la geometría de los componentes de fundición, como las torres de amortiguadores y los puntales, para mejorar la rigidez torsional al tiempo que se reduce el peso. Por primera vez en un modelo Ferrari de carretera, se ha utilizado una aleación secundaria hecha al 100% de material reciclado para fabricar las torres de choque del subchasis de la caja de cambios.
Asimismo, encontramos el sistema independiente de cuatro ruedas directrices (4WS) introducido en la serie especial 812 Competizione, que ajusta el movimiento de cada rueda independientemente de las demás para mejorar la gestión en el paso de curva y la capacidad de respuesta al cambiar de dirección.
También con carrocería descapotable
A diferencia de otras ocasiones, Ferrari ha presentado a la par la versión descapotable. Esta versión, conocida como 12Cilindri Spider, sólo pesa 60 kilogramos más que la de carrocería cerrada y cuenta con enlaces de refuerzo de aluminio entre la jaula antivuelco situada detrás de los ocupantes y el pilar B. Esta solución garantiza un importante ahorro de peso y un centro de gravedad más bajo. Dispone de una capota rígida retráctil (RHT) que mejora la habitabilidad gracias a su doble curvatura por encima de las cabezas del conductor y el pasajero. Tarda 14 segundos en completar la operación de apertura o cierre a velocidades de hasta 45 km/h.
