Los motores diésel llevan años estando en el punto de mira de la Unión Europea, que no se esconde al reconocer que tiene sus propios planes para retirarlos de la circulación más pronto que tarde. Y su aliado ahora son las estaciones de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV), que en los próximos meses podrían empezar a aplicar un nuevo sistema de control más estricto para los vehículos Euro 4 y Euro 5, centrado sobre todo en el filtro de partículas. Si lo tienes trucado, obstruido o directamente eliminado, tu coche no va a pasar la prueba.
¿Y por qué esta medida? Porque las autoridades europeas se han dado cuenta de que hay muchos vehículos con tecnología anticonataminación que la llevan anulada. Un truco para pasar desapercibido que a partir de ahora podría costarte muy caro y no te permitirá mantener el diésel muchos años más.
Lo que viene desde Europa y aplicará a las ITV
Bruselas lo ha repetido por activa y por pasiva: los motores diésel que incumplen los límites de emisiones no tienen cabida en el futuro parque móvil europeo. Y ya no basta con que lleven un filtro de partículas instalado de fábrica. Lo que ahora se va a exigir es que ese filtro funcione y sea eficaz.
El nuevo protocolo en las ITV, que ya ha comenzado a implantarse en países como Alemania, Suiza o Países Bajos, permitirá detectar si el filtro de partículas ha sido eliminado, manipulado o está fuera de servicio. ¿Cómo? Desde 2009, los vehículos al pasar la ITV tienen que pasar la prueba que mide el número de partículas en suspensión por centímetro cúbico durante 30 segundos al ralentí. Si no filtra, no pasa. Sin embargo, ahora se suma una comprobación extra para saber si el sistema anticontaminación está funcionando o no.
Los que están en el punto de mira de Europa (y de las ITV) son los diésel matriculados entre 2011 y 2015, es decir, los homologados con normativa Euro 4 y Euro 5. Muchos de estos vehículos circulan por nuestras carreteras con sistemas anticontaminación capados, anulados o deteriorados, y hasta ahora pasaban desapercibidos al pasar la ITV por la falta de control técnico. Pero eso está a punto de llegar a su fin.
¿Y ahora qué? Lo que te puede pasar si tu coche no pasa la prueba de humos
El filtro de partículas empezó a ser obligatorio en 2009 para los motores diésel, pero no todos los modelos posteriores a esa fecha conservan el sistema operativo. Muchos usuarios optaron por eliminarlo cuando aparecían fallos, dadas las complicaciones mecánicas y el coste de la reparación. El problema es que, en muchos casos, ya no existen recambios nuevos para esos filtros.
Esto deja a miles de vehículos en una situación en la que no nos gustaría estar. Si no superan la nueva prueba de humos en la ITV, sus propietarios tendrán que elegir entre reinstalar un sistema carísimo (cuando esté disponible) o dar de baja el coche. En Alemania, por ejemplo, medio millón de diésel ya han desaparecido por no cumplir los nuevos criterios. Y es solo el principio de una norma que se va a extender por el resto del continente.
La normativa europea también podría afectar a los seguros, aunque de forma indirecta. En caso de accidente, circular sin filtro de partículas o con uno inoperativo podría interpretarse como una negligencia técnica, con consecuencias tanto en la cobertura como en la responsabilidad civil.
El futuro pinta complicado para muchos propietarios de vehículos diésel Euro 4 y Euro 5. Aunque sigan funcionando perfectamente y pasen desapercibidos a nivel estético, el nuevo criterio ‘invisible’ prestará más atención al filtro de partículas. Y en cualquier caso, las ciudades ya están imponiendo medidas cada vez más restrictivas para los coches diésel en las ZBE.
