Nissan lleva años aportando experiencia a la movilidad eléctrica. Más allá del Tama, su primer modelo eléctrico en 1947, desde 2010 cuenta con el Leaf, renovado a conciencia el pasado año y uno de los vehículos cero emisiones más vendidos del mundo. Sin embargo, la marca japonesa está decidida desde ahora a protagonizar una auténtica ofensiva eléctrica y el nuevo Ariya será la primera gran piedra angular de este ambicioso proyecto.
Se trata de un crossover de estilo coupé que, desde que se tuvo alguna noticia sobre su existencia, siempre se comentó que pretendía ser una especie de Qashqai eléctrico. Además de una línea más deportiva, el Ariya está más cerca en tamaño al X-Trail que al propio Qashqai. Mide 4,60 metros de largo, 1,85 de ancho y 1,66 de alto. La distancia entre ejes alcanza los 2,78 metros, contempla versiones con tracción delantera o total y llegará a Europa con cinco motorizaciones diferentes, con hasta 394 CV de potencia y hasta 500 kilómetros de autonomía en ciclo WLTP.
Nuevo logo con 'vida propia'
El diseño futurista y contundente del Ariya no pasa desapercibido. Gustará más o menos, pero nadie puede negarle personalidad y originalidad. Es el punto de partida de una nueva era sustentada sobre la nueva plataforma EV desarrollada por la Alianza, junto a Renault y Mitsubishi. El frontal es poderoso, trabajado y futurista. Presenta finos faros compuestos por cuatro miniproyectores de LED en la zona alta, intermitentes dinámicos, una parrilla cerrada de nueva identidad y un renovado logo de la marca que se ilumina con 20 leds cuando el vehículo está listo para iniciar la marcha.
Lateralmente destacan los cortos voladizos, unas generosas llantas de aleación de hasta 20 pulgadas y la pronunciada caída de techo en la parte final, con protagonismo especial para el inclinado pilar C. Y la zaga se remata con una tira de luz led que va de 'costa a costa', muy de moda actualmente. Deportividad y elegancia, acentuada por el acabado bicolor que muestra en su puesta de largo.
El interior también es 'diferente'. Lo primero que llama la atención es su habitabilidad, facilitada por la plataforma eléctrica que permite sacar el máximo provecho al habitáculo en detrimento de un vano delantero menor debido a que los propulsores eléctricos son más compactos que los térmicos. También ayuda un piso totalmente plano gracias a la ubicación de la baterías en la base del chasis, entre ambos ejes.
Interior amplio y minimalista
La presentación es totalmente digital y muy minimalista. No hay mandos visibles, salvo en el volante multifunción. En el salpicadero aparecen sólo cuando se pone en marcha el Ariya, son hápticos y nos permiten regular la climatización. El cuadro de mandos y la pantalla táctil del salpicadero son digitales, están prácticamente unidos y cuentan con un generoso tamaño de 12,3 pulgadas cada una. La enorme consola central es ajustable en su posición y con memoria de posición si se desea. En ella encontramos una mini-palanca del cambio y debajo un enorme hueco para dejar objetos. Escondida debajo del centro del panel de instrumentos hay una bandeja desplegable muy útil para convertir el interior en una oficina móvil.
Los asientos son confortables y también presume de un amplio espacio para las piernas en las plazas traseras. El maletero, por su parte, ofrece 468 litros en la versión con tracción delantera, y 415 si cuenta con tracción total. El volumen se puede ampliar abatiendo los respaldos traseros por secciones (60/40).
Cinco versiones diferentes
La oferta del Ariya contempla un amplio abanico, con dos capacidades de batería, cinco niveles de potencia y tracción delantera o total. Así podemos elegir el vehículo con una batería de iones del litio de 63 kWh de capacidad, o una más poderosa de 87 kWh. La potencia del motor eléctrico sería de160 kW (217 CV) con tracción delantera o 205 kW (278 CV) con tracción total. La batería de 87 kWh cuenta con una versión de 178 kW (241 CV) en 4×2 y 225 kW (306 CV) en 4×4. Además añade una variante Performance con 290 kW (394 CV) y 600 Nm. La autonomía oscila entre los 360 y los 500 kilómetros, según la versión, en ciclo WLTP. La velocidad máxima está limitada a 160 km/h en los modelos con tracción delantera y alcanza los 200 km/h en las que montan la tracción total e-4ORCE.
Y es que estas siglas hacen referencia a la sofisticada tracción total eléctrica de Nissan. Se consigue con la incorporación de un segundo motor eléctrico que da vida a las ruedas traseras. De esta forma se optimiza la distribución de par delantero y trasero y el sistema aplica un control de freno independiente en cada una de las cuatro ruedas para maximizar la fuerza de giro generada por una de ellas. Los dos motores contemplan frenada regenerativa y los ingenieros aseguran que se han minimizado los balanceos y cabeceos de la carrocería. El conductor puede elegir entre los modos Normal, Sport y ECO; los modelos e-4ORCE añaden un modo Snow para superficies de baja adherencia.
La distribución de pesos es casi perfecta, aunque en la báscula el Ariya se sitúa entre 1.800 y 2.300 kilos, según la versión. Todavía no hay datos homologados de consumos o tiempos de recarga, pero la marca sí que ha adelantado que las versiones de 63 kWh incorporan un cargador de 7,4 kW para uso doméstico, mientras que las versiones de 87 kWh incluyen un cargador trifásico de 22 kW para carga doméstica. El Ariya también puede soportar una carga rápida de hasta 130 kW que reducirá drásticamente el tiempo a la hora de afrontar un largo desplazamiento (carga para 375 kilómetros en 30 minutos).
Avanzado tecnológicamente
Por último, y no por eso menos importante, destacar el gran compromiso del Ariya en aspectos como la seguridad y la conectividad. Con luz propia brilla la última generación del sistema ProPILOT, que ofrece posibilidad de cierta conducción autónoma, ajustando la velocidad, reconociendo vehículos, trayectos… La función e-Pedal, ya conocida en la última generación del Leaf, permite acelerar y frenar utilizando sólo el acelerador. Al levantar el pie la frenada regenerativa es tan intensa que cuando nos acostumbramos ya apenas utilizaremos el pedal del freno, aprovechando al máximo la energía que se almacena en la batería. El escudo de protección inteligente incluye una cámara 360º, control inteligente de colisión frontal, sistema anti-colisión frontal inteligente y la tecnología de sistema automático anti-colisión trasera.
El Ariya será uno de los mejores vehículos conectados con el exterior. Desde casa podemos saber el estado de la carga de la batería, programar la carga, planificar una ruta, climatizar el interior… todo desde el smartphone gracias a la aplicación Nissan Connect. Al acercanos al vehículo y reconocer la llave, nos recibirá encendiendo las luces y ajustando las posiciones de volante o asientos. Y desde ese momento se puede disfrutar del nuevo control por voz para gestionar diferentes funciones del vehículo. Además contempla conectividad 4G.
El Ariya también es el primer modelo de Nissan con actualizaciones inalámbricas de firmware, denominadas Remote Software Upgrade. La tecnología actualiza automáticamente varios software del vehículo, como el que controla el sistema multimedia, el sistema eléctrico y electrónico, el chasis, el climatizador y la configuración de VE, sin tener que llevar el vehículo a un centro de servicio. Gracias a las actualizaciones periódicas en tiempo real, el Ariya siempre estará funcionando a su máximo potencial.