¿Sospechas que la Dirección General de Tráfico (DGT) te ha puesto alguna multa durante tus vacaciones de verano? La vigilancia en carretera está presente hasta cuando tú desconectas y te relajas, y es precisamente al bajar la guardia cuando llegan las sanciones por exceso de velocidad o despistes.
Si crees que la DGT te ha puesto una multa este verano, ¿quieres saber cuánto tiempo tardan en notificarte una sanción? Sabemos que tenemos 20 días naturales para pagarla (si no queremos reclamar) y acogernos al derecho por pronto pago, pero lo que no es tan evidente son los tiempos que tiene Tráfico para notificarnos.
De hecho, lo que no todo el mundo sabe es que las multas prescriben, y así lo contempla la Ley de Tráfico. Por tanto, te conviene saber qué plazos maneja la DGT para saber si la sanción que te ha llegado a casa tiene validez legal o no.
¿Cuánto tarda la DGT en notificar una multa?

La Ley de Tráfico no contempla ningún calendario oficial, pero sí que hay tiempos aproximados por los que nos podemos guiar según las prácticas habituales de la DGT. En el caso de las infracciones que captan los radares fijos en carretera, suelen llegar en una o dos semanas. Incluso es posible que el plazo se reduzca a unos días si el conductor tiene activada la Dirección Electrónica Vial (DEV), el buzón electrónico de tráfico para recibir notificaciones electrónicas.
¿Y si la multa no depende directamente de la DGT? Por ejemplo, si es una sanción por saltarte un semáforo. En estos casos, es el ayuntamiento correspondiente quien tramita la multa, así que los tiempos se alargan y pueden tardar hasta más de un mes. Depende mucho de la agilidad (y el tamaño) del consistorio, su capacidad de gestión administrativa y de los expedientes que tenga abiertos.
También influye mucho la vía por la que se comunique la sanción. No es lo mismo si un agente te para en el momento y te notifica la infracción (alcoholemia, exceso de velocidad) o te deja un boletín de denuncia, habitual si has aparcado mal. En cambio, el proceso es mucho más lento cuando se hace por correo certificado. Y si no estás en casa, puede terminar en el buzón de ausentes de Correos.
Por tanto, no hay un plazo fijo ni la DGT (o los ayuntamientos) envía siempre las multas dentro de unos tiempos concretos. Depende mucho del organismo que sancione y la vía de notificación, aunque bien diferente es el plazo de prescripción.
El plazo de prescripción de las multas de tráfico

No es lo mismo el tiempo que tarda en llegar que el plazo de prescripción, porque este último está regulado. La Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial fija las siguientes fechas:
- Infracciones leves (menos de 100 euros): prescriben a los 3 meses.
- Infracciones graves y muy graves: prescriben a los 6 meses.
Esto significa que si no te ha llegado la multa por una de las vías que contempla la DGT, la sanción prescribe y no tienes que pagarla. Ahora bien, que no te llegue a casa no significa que no te hayan notificado. Una sanción te puede llegar por correo postal, a la DEV, al buzón de la aplicación MiDGT o, en última instancia, por el Tablón Edictal de Sanciones (TESTRA) o directamente aparecer en el BOE. Si se publica ahí, no lo sabes y no lo consultas, la multa es igualmente válida.
En cualquier caso, los protocolos de la DGT son cada vez más eficientes y hay menos riesgo de que una multa se ‘pierda’ o que te llegue cuando ya ha prescrito.