Conducir nos ofrece una gran libertad, incluida la de personalizar el interior de nuestro coche a nuestro gusto. Pero existen detalles que pueden llevarnos a una multa inesperada. Uno de ellos es la colocación de objetos en el interior del vehículo que puedan interferir en la seguridad y la visibilidad al volante. Aunque parezca algo inocente, esta costumbre podría salirte bastante cara. ¿Sabías que hay formas legales de llevar estas decoraciones sin exponerte a sanciones? Lo descubrimos a continuación.
2El retrovisor central: el error más común
Uno de los errores más habituales es colgar objetos en el espejo retrovisor interior. Muchas personas consideran este espacio el lugar perfecto del coche para colocar un pequeño ambientador, una figura religiosa o incluso un recuerdo especial. Pero lo que pocos saben es que este gesto puede costarles caro.
El artículo 19 del Reglamento General de Circulación lo deja claro: “la superficie acristalada del vehículo debe permitir la visibilidad diáfana del conductor”. Es decir, cualquier elemento que entorpezca tu campo de visión puede ser motivo de multa. El retrovisor central es un elemento de seguridad crucial que debe permanecer libre de obstrucciones. Si algo colgando de él distrae tu atención o dificulta ver claramente la carretera, podrías estar poniendo en riesgo tu seguridad y la de los demás.