¿Alguna vez has mirado por el retrovisor y te has sentido incómodo al ver un enorme camión o un autobús pegado a tu parachoques? Esa sensación de amenaza no es solo una impresión psicológica. Hay un motivo muy real y preocupante por el que deberías evitar, en la medida de lo posible, circular con uno de estos vehículos pesados justo detrás de ti.
Muchos de estos gigantes de la carretera circulan con defectos graves en su sistema de frenado. Una simple avería en esta parte crítica podría ser suficiente para que el vehículo no se detenga a tiempo y, si eso ocurre detrás de ti, imagina las consecuencias. Por seguridad, nunca es buena idea permitir que un camión o autobús te siga muy de cerca.
4Vehículos pesados, accidentes graves

Cuando vehículos de gran tonelaje fallan en los frenos, no se trata de un simple golpe. Los accidentes protagonizados por camiones o autobuses suelen tener consecuencias mucho más graves. La combinación de masa, velocidad y fallos mecánicos puede derivar en tragedias con víctimas, no solo de los ocupantes del vehículo pesado, sino también de coches cercanos que no tienen escapatoria alguna frente a semejante mole.
Además, este tipo de vehículos tienen una capacidad de maniobra muy limitada. En caso de emergencia, un coche puede esquivar o frenar en seco; un camión o un autobús, no. Su gran tamaño y peso hacen que cualquier reacción sea más lenta. Si sumamos a la ecuación unos frenos defectuosos, los motivos son muchos para un desastre casi garantizado.