¿Alguna vez has mirado por el retrovisor y te has sentido incómodo al ver un enorme camión o un autobús pegado a tu parachoques? Esa sensación de amenaza no es solo una impresión psicológica. Hay un motivo muy real y preocupante por el que deberías evitar, en la medida de lo posible, circular con uno de estos vehículos pesados justo detrás de ti.
Muchos de estos gigantes de la carretera circulan con defectos graves en su sistema de frenado. Una simple avería en esta parte crítica podría ser suficiente para que el vehículo no se detenga a tiempo y, si eso ocurre detrás de ti, imagina las consecuencias. Por seguridad, nunca es buena idea permitir que un camión o autobús te siga muy de cerca.
3La ITV: la barrera que muchos no superan

La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) debería ser la herramienta para garantizar que todos los vehículos que circulan por las carreteras son seguros. Pero las cifras no dicen lo mismo. A los centros de la AECA-ITV, han llegado vehículos industriales con auténticas chapuzas: frenos con el disco fracturado, pérdidas de líquido, depósitos sujetos con bridas… Auténticas ruletas rusas sobre ruedas.
Y no son casos aislados: más de 400 estaciones ITV han registrado estos defectos. Por falta de tiempo, recursos o simple negligencia, muchos transportistas acuden con frenos en condiciones lamentables. Motivo suficiente para hacernos reflexionar sobre qué tipo de vehículos comparten carretera con nosotros y si queremos estar justo delante de ellos.