Mini quiere satisfacer las necesidades de aquellos que estén buscando una versión aún más deportiva de su singular Mini John Cooper Works. Precisamente para aquellos que además de disfrutarlo en carreteras abiertas, quieren deleitarse de vez en cuando jugando en cualquier circuito del mundo los fines de semana.
8.950 libras más que un JCW
Pensando en estos úlitmos, Mini puso a trabajar a su equipo de competición y el resultado es ni más ni menos que este Mini John Cooper Works Challenge. Desgraciadamente antes de seguir, debemos informarte que se trata de una edición limitada, pues sólo se van a fabricar 100 ejemplares. Si tras leer esto ya estás marcando el número de teléfono para reservar el tuyo, te daremos otra mala noticia, porque sólo se venderán en Reino Unido y todos ellos contarán con volante a la derecha. Decir que allí tendrá un precio de 32.000 libras, que al cambio actual sería algo así como 40.600 euros. Esta cifra contrasta con las 23.050 libras que allí cuesta un Mini JCW «de serie», es decir, 29.300 euros.
Para desarrollar estos Mini John Cooper Works Challenge se parte de un Mini JCW «convencional», con el que comparte además su propulsor 2.0 TwinPower Turbo, que es capaz de proporcionar una potencia de 231 CV y un par máximo de 320 Nm. Las mejoras incorporadas elevan su peso hasta los 1.290 kilos (10 más que un JCW), pero sus prestaciones se mantienen inalteradas, con una punta de 246 km/h y un tiempo de 6,3 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h. Sólo se combinará con una transmisión manual de 6 velocidades, pero suspensiones, aerodinámica, frenos y otros muchos elementos se han revisado para transformar a este Mini en una verdadera máquina para los track days.
Nuevo kit aerodinámico
En su exterior se equipan unos nuevos pasos de rueda que ensanchan ligeramente su carrocería (obligados porque sus neumáticos pasan de 205 a 215 milímetros de ancho), del mismo modo que estrena unas tomas de refrigeración de mayores dimensiones, así como un alerón trasero más grande. Opcionalmente todas estas piezas pueden ser de fibra de carbono si nos decantamos por el paquete Pro Aerokit JCW, que además suma un sistema de escape cuyos terminales también son de carbono.
Se opta a su vez por equiparlo con unas llantas forjadas de 17 pulgadas que ahorran 1,5 kilos cada una respecto a las que emplea de serie. Se calzan con neumáticos Michelin Pilot Super Sport Cup 2S en medida 215/45. Básicamente una goma semi-slick. Tras ese nuevo juego de llantas encontramos un nuevo equipo de frenos delantero, formado por unos discos perforados de 330 milímetros de diámetro y unas nuevas pinzas firmadas por Mintex.
Suspensiones completamente regulables
Sigamos con las suspensiones, pues suponen un cambio revolucionario frente a un Mini JCW. Se opta por unos nuevos amortiguadores del tipo coilover que han sido creados por Nitron, quien también equipa los Mini de competición. Algunos de sus componentes se fabrican en titanio y aluminio, y son completamente regulables en altura, extensión y compresión. Se equipa a su vez con un cámber que nos permite incrementar la caída negativa de sus neumáticos, aunque Mini nos ofrecerá los ajustes recomendados tanto para la carretera como para los circuitos. Y para rizar el rizo, su diferencial delantero se ha reemplazado por uno mecánico Quaife que incrementa su capacidad de tracción a la hora de abrir gas.
Este singular Mini John Cooper Works Challenge será presentado en el Festival de la Velocidad de Goodwood y a Reino Unido no tardará demasiado en llegar.