El último integrante en llegar a la nueva familia Mini (compuesta actualmente por los tres puertas, cinco puertas y Clubman, mientras que el nuevo Countryman llegará en 2017) es este nuevo Mini Cabrio, el cual acaba de aterrizar en los concesionarios españoles desde 22.700 euros.
Se abre y cierra en 18 segundos
Toma la base de los Mini de tres puertas, generación conocida como F57, que estrenó una plataforma completamente nueva y que está compartida también con otros modelos de tracción delantera de BMW. Comparte dimensiones exteriores con los Mini de tres puertas, siendo ligeramente más largo, ancho y alto que su antecesor, y hasta el pilar A son dos gotas de agua.
Pero este Mini Cabrio tiene algo que lo hace especial y no es otra cosa que su característica capota de lona, que se puede abrir y cerrar por completo en sólo 18 segundos y de forma completamente eléctrica. La personalización es una de sus señas de identidad, algo a lo que nos tiene acostumbrados Mini. Por este motivo es por el que ofrecen nada menos que 13 colores exteriores, otros tantos diseños de llantas, diferentes carcasas para los retrovisores… Incluso ahora podemos plasmar la mítica bandera ?Unión Jack? en su techo de lona, opción que nos va a costar 650 euros y que le aporta un toque diferenciador.
Más espacioso que su antecesor
Este techo sigue teniendo una posición «techo solar» que permite abrir sólo la parte de los asientos delanteros, aunque la «gracia» es quitarlo por completo, operación que ahora se puede hacer hasta 30 km/h. Para ello hay que dejar siempre presionado un botón junto al espejo retrovisor interior, que obliga a despegar la espalda del respaldo del asiento. Además no hace ningún sonido para advertirnos de que la operación ha finalizado (si hay señal visual). Queda plegada tras los dos asientos traseros, con 36 milímetros más de espacio para las piernas y 13 milímetros más de anchura que su antecesor, por lo que ahora hay más sensación de desahogo, aunque el aforo sigue estando limitado a cuatro. Tras estos asientos se encuentran ocultos los arcos de seguridad, que emergen en caso de accidente.
El maletero del nuevo Mini Cabrio también crece y oscila entre los 215 y los 160 litros de capacidad, ofreciendo el mismo volumen que un Mini tres puertas cuando circulamos con el techo colocado. La tapa sigue abriéndose a modo de Pick-Up y si viajas más cargado de lo habitual te permite abatir los respaldos en dos secciones 50:50. Mini ha desarrollado un sistema que permite levantar la zona de la capota que se comunica con la tapa del maletero cuando esta se encuentra puesta (lo debería hacer también con ella recogida). Se llama «Easy Open» y sirve para ganar algunos centímetros extra en altura con el fin de introducir más fácilmente objetos voluminosos. Pero es cierto que este sistema debería estar mejor resuelto y cerrar mejor.
Mejora en ergonomía, pero…
El puesto de conducción es típico Mini y te amoldas a él en cuestión de segundos. En esta generación se ha mejorado la ergonomía y si lo equipamos con climatizador bizona tiene un funcionamiento diferente para circular con o sin techo, techo que por cierto limita en exceso la visibilidad por el espejo retrovisor cuando se encuentra plegado.
Circulando hasta 80 km/h se puede ir con las ventanillas laterales bajadas y tanto el aire como el ruido no molestan. Por encima de esa velocidad es mejor subir las ventanillas y mejor aún es optar por el deflector trasero, el cual se pone y quita de forma manual (cuando se quita hay que guardarlo en el maletero), además de que limita el aforo a dos. Con él colocado, se pueden mantener cruceros a velocidades legales sin despeinarte, y eso que este Mini Cabrio recurre a una luna delantera bastante pequeña y que aporta sensación de libertad. Ahora bien, las vistas no son del todo perfectas, pues afea el entorno la antena de su equipo de sonido, colocada sobre el marco de la luna delantera.
Seis opciones mecánicas
Durante su presentación tuvimos ocasión de conducir la versión Cooper S, la cual brilla con sus prestaciones y su ajustado consumo, además de que le procura al Mini Cabrio un marcado carácter deportivo, que se hace más patente si optamos por las suspensiones adaptativas, siempre firmes y responsables de su característica dinámica (de serie equipa un selector con los modos ECO, Normal y Sport). Esta versión en concreto arranca en los 31.350 euros, lo que viene a ser un capricho por el que hay que pagar nada menos que 5.400 euros más que la versión de tres puertas equivalente (25.950 euros cuesta un Mini Cooper S). Ahora bien, para disfrutar del buen tiempo también nos podemos decantar por cualquier otra motorización ofrecida por Mini, las cuales oscilan entre los 116 y los 170 CV en diésel, y entre los 102 y los 231 CV en el caso de los motores de gasolina, destacando este último, exclusivo para los deportivos Mini Cabrio John Cooper Works.
Con todo ello, los precios para España de los nuevos Mini Cabrio son:
Mini Cabrio One 102 CV: 22.700 euros
Mini Cabrio Cooper 136 CV: 25.200 euros
Mini Cabrio Cooper S 192 CV: 31.350 euros
Mini Cabrio John Cooper Works 231 CV: 36.350 euros
Mini Cabrio Cooper D 116 CV: 26.950 euros
Mini Cabrio Cooper SD 170 CV: 34.250 euros
Todos ellos tienen un equipamiento muy completo, donde incluso se contempla la cada día más habitual, llama de emergencia. Mini confía en poder comercializar en nuestro mercado más de 700 unidades de este nuevo Mini Cabrio en este año 2016, los cuales permitirán a sus clientes disfrutar del buen tiempo. Para ello también ayuda su nueva App Journey Mate, asociada a su sistema multimedia, que nos avisa del momento exacto en el que se va a poner a llover para que estemos prevenidos… Pero es cuestión de 18 segundos.