Hace 20 años, Mercedes desarrolló una versión de calle del modelo que hacía de safety car en el campeonato de Fórmula 1. Sí, han leído bien, una versión de carretera de un coche de carreras basado a su vez en la versión de carretera.
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Este CL55 AMG F1 Limited Edition se lanzó al mercado en mayo del año 2000, coincidiendo con el inicio del campeonato de F1 y se basaba muy de cerca en el coche de seguridad. Tan solo se hicieron 55 de estos modelos y cada uno costaba 330.000 marcos alemanes, unos 168.726 euros al cambio actual. Es por tanto, por precio, exclusividad, historia, pedigree y tecnología, una auténtica pieza de colección y tan solo se construyeron entre el verano del año 2000 y el de 2001.
Como se basaba en el CL55 AMG 'corriente' tenía bajo el capó un motor V8 de 5,5 litros atmosférico hecho a mano por AMG, elemento que le servía para tener 360 CV de potencia y pasar de 0 a 100 en 6 segundos. Pero la novedad se encontraba en los frenos, unos discos perforados cerámicos reforzados con pinzas de freno Brembo de ocho pistones.
