Emma García, la popular presentadora del programa Fiesta de Telecinco, se quedó maravillada ante un invento que ha comenzado a revolucionar la forma en que nos movemos en los aeropuertos: una maleta que, con solo presionar un botón, se convierte en un patinete eléctrico. Durante una de las emisiones del programa, no pudo resistirse a probar esta curiosa innovación, deslizándose con una sonrisa de sorpresa mientras demostraba su funcionalidad en vivo.
El invento, que parece sacado de una película de ciencia ficción, ha comenzado a viralizarse en redes sociales por su practicidad y por el divertido momento que generó en el plató. Esta maleta-patinete no es solo un juguete para las celebridades, sino que está diseñada para solucionar un problema muy real: la movilidad en grandes aeropuertos y estaciones de tren.
Así se creó la maleta-patinete que disfruta Emma García
La idea surgió de una experiencia personal, cuando los creadores de este ingenioso producto perdieron un vuelo tras correr por un aeropuerto demasiado grande. Así, la inspiración para crear una maleta que permita al usuario desplazarse rápidamente surgió de la frustración que millones de viajeros han experimentado alguna vez. Lo que muchos no saben es que esta maleta revolucionaria tiene un fuerte componente español.
Aunque se fabrica en China, el concepto y la distribución en exclusiva para España son obra de una firma cordobesa. La compañía, liderada por Jesús Moreno, quien también es el director comercial de la plataforma moonwalker.es, se ha encargado de traer esta maleta eléctrica al país, permitiendo a los usuarios experimentar un nuevo nivel de movilidad urbana y en estaciones de transporte.
Características de este impresionante invento que alucinó a Emma García
El ingenioso equipaje está diseñado para ser completamente funcional y práctico. Puede soportar un peso de hasta 100 kilos y alcanza una velocidad de hasta 14 kilómetros por hora, que es aproximadamente el triple de lo que camina una persona promedio. Esto significa que, en lugar de tener que caminar largas distancias con una maleta a cuestas, el usuario puede deslizarse cómodamente por el aeropuerto o la estación, ahorrando tiempo y esfuerzo.
El funcionamiento de esta maleta es sorprendentemente sencillo y eficaz, como mostró Emma García. Al apretar un botón, la maleta despliega un pequeño sillín, mientras que desde el frente se extiende un manillar telescópico. De esta manera, el equipaje de mano se transforma en un patinete eléctrico en cuestión de segundos. Este diseño permite que el viajero se desplace fácilmente sin tener que cargar con el peso de la maleta, y lo mejor es que sus dimensiones están homologadas para caber en la cabina de un avión, por lo que no hay necesidad de facturarla.