La convivencia en una comunidad de vecinos no siempre es sencilla, sobre todo en zonas como el garaje. En él coinciden decenas de vehículos, distintos intereses y, en ocasiones, se producen conflictos por su uso. Para evitar malentendidos, la Ley de Propiedad Horizontal establece con claridad qué puede y qué no puede hacer cada propietario.
Tener una plaza de garaje en propiedad dentro de una comunidad no es solo disponer de un espacio para estacionar el vehículo. También implica contar con una serie de derechos que garantizan su uso y la participación en las decisiones y la gestión de los elementos comunes. Conocerlos es clave para disfrutar con tranquilidad de tu plaza y, al mismo tiempo, defender tu patrimonio.
5Derecho a información y transparencia
Otro pilar de la Ley de Propiedad Horizontal es el acceso a la información. Como propietario, tienes derecho a conocer los presupuestos, gastos, estado de las cuentas y cualquier gestión que afecte al garaje. La transparencia es fundamental para garantizar que las cuotas se destinan correctamente y no hay irregularidades en la administración.
Este derecho te permite, también, solicitar aclaraciones y, dado el caso, impugnar acuerdos que consideres perjudiciales o poco claros. La información es poder; y en una comunidad, puede marcar la diferencia entre una gestión eficiente y una fuente constante de conflictos.
