Conducir no es únicamente girar una llave y poner en marcha el vehículo. Es enfrentarse a un entorno en constante cambio, en el que las condiciones meteorológicas y ambientales juegan un papel fundamental en la seguridad. La DGT (Dirección General de Tráfico) lo sabe bien: España, con su diversidad climática y su gran red de carreteras, está expuesta a situaciones que pueden convertir un trayecto aparentemente sencillo en un verdadero desafío. Incendios forestales que avanzan a gran velocidad, olas de calor que convierten el asfalto en un horno o tormentas que descargan con violencia son escenarios cada vez más habituales.
El cambio climático y la mayor frecuencia de fenómenos extremos obligan a estar más preparados que nunca. Ya no basta con revisar el coche antes de salir o planificar la ruta: ahora, el conductor debe contar con protocolos de actuación claros, porque cualquier imprevisto puede aparecer en cuestión de minutos. La DGT, consciente de este contexto, ha elaborado una serie de recomendaciones muy concretas que no solo buscan evitar accidentes, sino también reducir riesgos para los propios viajeros y facilitar el trabajo de los equipos de emergencia.
1Incendios en carretera: qué hacer y qué evitar

Uno de los escenarios más peligrosos al volante es encontrarse con un incendio en plena ruta. Los incendios forestales no solo avanzan con rapidez, sino que generan humo espeso, reducen la visibilidad y pueden intoxicar a los ocupantes del vehículo. La DGT es tajante en este punto: nunca debes intentar atravesar una zona en llamas, aunque te parezca que el fuego está lejos o que “puedes pasar rápido”. El riesgo de quedar atrapado es enorme.
Si te topas con un corte de carretera por incendio, obedece siempre las indicaciones de la Guardia Civil o de los equipos de emergencias. Dar la vuelta o tomar un desvío autorizado es la única opción segura. En caso de no poder continuar, lo más recomendable es detenerse en un lugar seguro, cerrar ventanillas, apagar la ventilación y llamar al 112 para comunicar tu posición. El coche puede servir como refugio temporal, pero si el fuego se acerca peligrosamente, la DGT recuerda que lo más seguro es desplazarse hacia una zona ya quemada o alejarse a pie si existe un claro despejado y accesible.