Hyundai está preparando un pequeño lavado de cara para el Kona, el SUV urbano que se ha convertido en uno de los modelos de más éxito en los últimos tiempos -por ejemplo, en España, ha sido el segundo modelo más vendido de la marca tras el Tucson en 2019- y también uno de los modelos de más futuro. No en vano, el Kona cuenta en su gama con variantes de propulsión que se adaptan a casi todo tipo de clientes.
Porque el modelo coreano está disponible con motores de combustión tradicional -diésel y gasolina-, pero además dispone de versiones electrificadas, como el Kona Hybrid de 141 caballos de potencia, o una variante cien por cien eléctrica con cero emisiones y dos rangos de uso, pues la versión de 64 kWh de batería es capaz de recorrer 449 kilómetros, mientras que la de 39 kWh llega a los 289 kilómetros ya con el protocolo de homologación WLTP.
Pequeños cambios estéticos
Con esa variedad tecnológica, al crossover coreano se le augura un futuro muy halagüeño. Y más si vemos que en los planes de la marca está un retoque del diseño del Kona para ponerlo al día. Nuestros colegas de CarPix lo han podido ver por primera vez en las pruebas que un prototipo del SUV coreano está realizando en el norte de Europa.
Sobre las heladas carreteras escandinavas vemos un Kona cargado de camuflaje, aunque tal vez eso no indique que los cambios vayan a ser muy profundos. Más bien al contrario, parece que el Kona recibirá un ligero lavado de cara, con cambios pequeños en el frontal -nueva parrilla, nuevos faros, algún retoque en el paragolpes…-. En la parte posterior habrá también pequeños cambios: nuevos gráficos de luces o retoques en el paragolpes trasero.
Y seguro que se producirán modificaciones en los motores y algún cambio en el diseño interior. Pero para conocerlo aún habrá que esperar un tiempo.