La policía del Reino Unido protagonizó una escena inusual al confiscar un Honda S2000 blanco y negro que había sido disfrazado de coche de policía japonés. El incidente ocurrió cuando los oficiales del equipo de Northants Roads Policing notaron el modelo de la marca asiática viajando hacia Santa Pod Raceway. Lo que llamó su atención fue una luz roja intermitente montada en el techo del coche deportivo, una característica común en los coches de policía japoneses.
Si bien la barra de luz no es visible en las fotos disponibles, el S2000 presentaba otros elementos que imitaban a un vehículo policial, como seis pequeños LED intermitentes en el exterior, dos en el parachoques delantero, dos en la parrilla delantera y dos en el parachoques trasero. Eso es completamente ilegal, pese a que parece divertido a la vista de todos.
¿Cómo terminó el Honda S2000 que estaba disfrazado de patrullero?
Al detener al conductor, la policía local descubrió que ni el vehículo ni el conductor estaban asegurados. Esta falta de responsabilidad no les dejó otra opción que confiscar el Honda y colocar pegatinas de color verde brillante en el parabrisas y la ventana trasera con el mensaje: «Vehículo sin seguro. Detenido por la policía».
A pesar de la falta de una barra de luz visible, el propietario del Honda S2000 se había esforzado por crear una imitación convincente de un coche de policía japonés. La combinación de colores en blanco y negro, el elemento negro en el capó, la pegatina «Policía» en el costado y las letras japonesas en la parte superior creaban una apariencia realista.
La reacción en las redes sociales por este Honda en modo patrullero policial
Este incidente ha generado reacciones mixtas en las redes sociales. Algunos usuarios han criticado al conductor de este Honda S2000 por su falta de responsabilidad y por poner en riesgo la seguridad pública al imitar un vehículo oficial. Otros han expresado admiración por la creatividad del disfraz y han cuestionado la severidad de la pena impuesta por parte de los agentes de seguridad.
Independientemente de las opiniones individuales, queda la anécdota de que este ingenioso disfraz no pudo salvar al conductor de las consecuencias de conducir un vehículo sin seguro. A los oficiales de seguridad de Reino Unido no les pareció muy gracioso, como si a los usuarios de las redes sociales, y le terminaron labrando la multa correspondiente por no haber tenido al día su seguro.
