Sin lugar a dudas el Honda CR-V es uno de los modelos con más éxito de la marca nipona. El año pasado el SUV fue el sexto más vendido del mundo, con 748.000 unidades comercializadas. Por ello, la marca continúa apostando con fuerza por este modelo y acaba de anunciar que las primeras unidades del nuevo CR-V llegarán a Europa a partir del próximo otoño.
El nuevo CR-V ha aumentado su distancia entre ejes en 40 mm, y se ha incrementado la distancia al suelo en otros 40 mm. Estos cambios, unidos al aumento en el ancho en 35 mm, han hecho que su interior sea más espacioso, al tiempo que se mantiene la longitud total.
En el habitáculo, los pasajeros de las plazas delanteras disfrutan de 5 mm más de espacio libre hasta el techo y de 16 mm más de ancho. Asimismo, la distancia entre los pasajeros delanteros y traseros se ha aumentado en otros 50 mm y un depósito de combustible más compacto ha conseguido ganar 50 mm de espacio para las piernas en la parte trasera. Además, el ángulo de las puertas traseras se ha aumentado 6 grados, para facilitar la entrada y salida.
Siete asientos por primera vez
Las versiones de gasolina estarán disponibles con la opción de siete asientos reclinables organizados en tres filas. Los asientos de la segunda fila se deslizan hacia delante y hacia atrás 150 mm respecto a la tercera fila de asientos, creando una amplia apertura de entrada y una postura cómoda para la espalda.
En cuanto a la capacidad del maletero, que cuenta con una plataforma de carga mayor que la de ningún otro CR-V, permite una longitud máxima de 1.830 mm en la versión de cinco asientos y de 1.800 mm en la de siete asientos, lo que supone 250 mm más que el modelo anterior.
Está confirmado que las primeras unidades del nuevo Honda CR-V lleguen a Europa en otoño de 2018, siendo las versiones VTEC Turbo de gasolina de 1.5 las primeras en estar disponibles, mientras que el modelo híbrido estará disponible a principios de 2019.