comscore
jueves, 11 septiembre 2025

La Guardia Civil revisa las sillitas de coche: Estos son los fallos que estás cometiendo al colocarla

La Guardia Civil, en sus controles rutinarios y campañas especiales, detecta una y otra vez los mismos errores al colocar los sistemas de retención infantil en el coche. Fallos que parecen poco importantes, pero que en caso de accidente pueden marcar la diferencia entre un susto y una tragedia.

Si crees que lo haces bien, sigue leyendo y descubre esos pequeños despistes que es muy probable que hayas cometido alguna vez.

3
Despistes que nadie ve, pero que importan

Fuente: Agencias

No todos los fallos son tan evidentes como un arnés suelto. Hay otros detalles que a menudo pasamos por alto y que la Guardia Civil también vigila.

Publicidad

La normativa i-Size recomienda que los niños viajen a contramarcha al menos hasta los 15 meses de edad. Pero la mayoría de los expertos y fabricantes de sillas aconsejan mantener esta posición hasta los 4 años, o hasta que el niño haya superado la altura máxima permitida por la silla.

¿Por qué? Un bebé o niño pequeño tiene la cabeza muy grande en proporción a su cuerpo. En un impacto frontal, si viaja de cara a la marcha, su cabeza saldrá proyectada hacia delante con una fuerza tremenda, mientras que su cuerpo queda sujeto. Esto puede provocar lesiones fatales en el cuello y la columna. A contramarcha, el impacto se distribuye por toda la espalda y la sillita absorbe la fuerza, protegiendo esa zona tan vulnerable.

Aunque la sillita parezca en perfecto estado después de un golpe, no lo está. Los materiales con los que están fabricadas sufren microfracturas invisibles que comprometen su integridad. Si esa sillita se ve envuelta en otro accidente, no cumplirá su función y no protegerá a tu hijo. La recomendación es reemplazar la silla después de cualquier impacto, incluso si ha sido leve y no ha habido heridos.

El mal uso de la sillita de coche, además de la multa de 200 euros y la retirada de puntos del carnet, tiene una consecuencia mucho más grave: el riesgo de que tu hijo no sobreviva a un accidente. La Guardia Civil revisa las sillitas para educar y concienciar. Un simple gesto como tensar el arnés, puede marcar la diferencia entre un susto y una historia que te cambiará la vida para siempre.

Siguiente
Publicidad