La Guardia Civil de Tráfico es responsable de mantener el orden y la seguridad en las carreteras, y para ello, utilizan señales claras que los conductores deben reconocer al instante. Ignorar estas señales no solo puede ocasionar multas, sino que también podría poner en riesgo tu seguridad y la de otros usuarios de la vía. Es crucial saber interpretar las señales que los agentes hacen para que detengas tu vehículo y actúes de forma adecuada.
4Motivos más comunes por los que te pueden detener

Los motivos para que la Guardia Civil te pida detenerte pueden ser diversos. Uno de los más comunes es la realización de controles rutinarios, como pruebas de alcohol o drogas, o verificar la documentación de tu vehículo. En otros casos, puede que hayas cometido una infracción de tráfico, como exceso de velocidad o uso indebido del teléfono móvil, y los agentes desean informarte y sancionarte.
También pueden detenerte para advertirte sobre una situación peligrosa en la carretera, como un obstáculo o un accidente más adelante. En este caso, la Guardia Civil puede proporcionarte instrucciones sobre desvíos o rutas alternativas. Sin importar la razón, siempre es crucial mostrar colaboración y cumplir con sus directrices.