La Guardia Civil y varias asociaciones del sector han identificado una nueva estafa que afecta a todo el que conduzca un coche eléctrico o un híbrido enchufable en España. No es phising, un correo malicioso ni ningún SMS fraudulento que puedas recibir en tu móvil, es algo más difícil de detectar a simple vista.
El engaño consiste en colocar pegatinas con códigos QR en los puntos de carga (o cerca), y prometen recargas gratuitas, tarifas planas o precios rebajados. A la hora de la verdad, llevan al usuario a una web fraudulenta y si metes tus datos bancarios, puedes perder bastante dinero.
La Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (AEDIVE) ha lanzado una advertencia a todos los conductores que utilicen estos puntos de recarga y la Guardia Civil ya ha iniciado una investigación. Son trampas cada vez más sofisticadas y que se parecen mucho a los mensajes de la DGT que recibimos para pagar una multa. Los trucos online los tenemos mucho más localizados, porque han sido los más habituales en los últimos años, pero estos en formato físico nos pillan desprevenidos todavía.
Cómo funciona el fraude que ya investiga la Guardia Civil

El procedimiento es bastante sencillo, y no tiene mucho misterio. Los estafadores colocan pegatinas falsas directamente sobre el poste de recarga, simulando promociones de las empresas energéticas. Lo más normal es encontrar códigos QR, pero también teléfonos para contactar vía WhatsApp, con el gancho de poder beneficiarse de recargas gratuitas o tarifas planas. Y la Guardia Civil ya lo vigila de cerca.
Esos códigos QR nos llevan a páginas web fraudulentas que imitan bastante bien los portales oficiales de Iberdrola, Repsol y otras grandes compañías. Algunas piden datos personales, otras solicitan el número de tarjeta o los datos de acceso a aplicaciones de pago, como PayPal. En el peor de los casos, puedes llegar a autorizar sin saberlo un cargo directo o una suscripción que después no tienes opción a cancelar.
AEDIVE y la Guardia Civil han detectado esta estafa en varias comunidades autónomas, incluso en estaciones de grandes empresas, como Repsol, donde los delincuentes han conseguido pegar sus etiquetas sin que nadie se dé cuenta de ello. ¿Y cómo puedes evitarlo? Tan sencillo como no escanear ningún QR que no aparezca en la pantalla oficial del punto de carga. Y si tienes dudas, contacta directamente con el servicio de atención al cliente del operador en cuestión antes de introducir cualquier dato de pago.
Por qué tienes que extremar la precaución si conduces un coche eléctrico

Los coches eléctricos e híbridos enchufables llevan relativamente poco tiempo con nosotros, y todavía no estamos tan familiarizados con sus sistemas como con el combustible de toda la vida. Los estafadores ya han llegado a esta transición ecológica y han encontrado un nuevo filón, a pesar de que la Guardia Civil ya ha ‘cazado’ esta nueva estafa.
El problema es que, al contrario de otros fraudes digitales, este sí que es tangible, y no tenemos tan activado el ‘radar’. Además, muchas veces vamos con prisa a las estaciones de servicio, poca cobertura o con batería baja, así que todo esto aumenta el riesgo de caer en la trampa.
Muchas de estas webs fraudulentas también instalan malware o rastreadores que recogen información sensible. Y si corres el riesgo de utilizar el mismo correo electrónico y contraseña en varias plataformas, el daño puede ser el doble.
Por tanto, la recomendación de la Guardia Civil es clara: no te fíes de ninguna oferta que no esté integrada en el sistema oficial de recarga ni en las aplicaciones oficiales. Nunca introduzcas datos de pago en páginas externas ni mucho menos escanees códigos QR que parezcan sospechosos. Y, como siempre, si el precio parece demasiado bueno para ser verdad, probablemente sea una estafa.