A la hora de conducir, hay elementos que son imprescindibles, y otros que se dejan en el coche “por si acaso”. Pero algunos de estos accesorios solo se pueden llevar cuando se necesitan, y la Guardia Civil está muy atenta en las últimas semanas a uno de ellos en concreto.
Seguro que lo has visto mil veces o hasta puede que seas uno de esos conductores que lo lleva instalado en el coche por comodidad. Pero muchos no saben que puedes llevarte una multa considerable. ¿Cuál es ese elemento? La bola del remolque.
El enganche que te puede costar una multa de la Guardia Civil
Antes de seguir, es necesario indicar que la normativa de tráfico en España no prohíbe circular con una bola de remolque instalada aunque no estés arrastrando nada. No existe un artículo en el Reglamento General de Circulación que diga de forma específica que está prohibido llevar un enganche sin remolque.
Entonces, ¿por qué la Guardia Civil está prestando especial atención a este elemento? La respuesta está en una de las normas más básicas de la seguridad vial: la correcta visibilidad e identificación del vehículo.
El verdadero problema, y el motivo principal de las sanciones, surge cuando la bola de remolque dificulta la lectura de la matrícula del coche. La Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial es tajante en este aspecto. Establece que las placas de matrícula deben ser perfectamente legibles y no pueden estar ocultas por ningún elemento u objeto. Si el enganche se interpone en la línea de visión de la matrícula, impidiendo que los números y las letras se vean con claridad desde cualquier ángulo, estás cometiendo una infracción.
¿Es obligatorio desmontar el enganche?
No todas las bolas de remolque son iguales y, por lo tanto, la forma de actuar de los agentes y la normativa aplicable varían. Es fundamental que sepas distinguir qué tipo de bola llevas para conocer tus obligaciones como conductor.
Si tu coche salió de fábrica con la bola de remolque como parte de su equipamiento original o si instalaste un enganche de tipo fijo que está homologado, el fabricante y la normativa de homologación ya han previsto que el dispositivo no puede obstaculizar la visión de la matrícula ni de las luces. Está diseñado para formar parte del vehículo de manera permanente. Por lo tanto, si tienes un enganche fijo que cumple con todos los requisitos legales y no tapa nada, no tienes la obligación de desmontarlo y no te deberían multar por llevarlo puesto. Es una parte más de la estructura de tu coche.
Los enganches desmontables son los que están en el centro de la polémica. Como su propio nombre indica, están diseñados para ser montados y desmontados con facilidad para que solo los utilices cuando los necesites. Si tienes instalado un enganche desmontable, la lógica y la normativa te dicen que, una vez que has terminado de usar el remolque, debes quitar la bola.
El motivo es claro: si este tipo de enganche, al estar colocado, tapa la matrícula o alguna luz, estás cometiendo una infracción de manera voluntaria, ya que tienes la posibilidad de retirarlo fácilmente. Argumentar ante un agente que no sabías que había que quitarlo no te servirá de excusa. La Guardia Civil considera que si el elemento es extraíble, tu obligación es retirarlo para garantizar la perfecta visibilidad de la matrícula.
En los últimos años, ha ganado popularidad una tercera vía: los enganches retráctiles. Son la solución más práctica y moderna. Con un simple gesto la bola se esconde bajo el parachoques, desapareciendo de la vista. Si tu coche equipa este sistema, no tienes de qué preocuparte. Solo asegúrate de ocultarlo siempre que no estés arrastrando un remolque y evitarás cualquier tipo de problema.
La multa, más allá de tapar la matrícula
Hasta ahora hemos hablado de la sanción por obstaculizar la matrícula, que suele ser de 200 euros. ¿Cómo podemos llegar a una multa de hasta 500 euros? Esto ocurre cuando el problema no es solo de visibilidad, sino de legalidad en la instalación del propio enganche.
Instalar una bola de remolque se considera una reforma de importancia, por lo que debe seguir un procedimiento muy estricto para que sea legal. Primero, debe ser un dispositivo homologado para tu modelo de coche. Segundo, la instalación debe ser realizada por un taller autorizado que emitirá un certificado. Y tercero, y más importante, debes pasar una (ITV extraordinaria para que anoten dicha reforma en la ficha técnica de tu vehículo.
Si la Guardia Civil te detiene y descubre que llevas un enganche que no figura en la ficha técnica, estás cometiendo una infracción grave. Circular con una reforma de importancia no autorizada se sanciona con una multa que puede alcanzar los 500 euros. Además, tu vehículo podría ser inmovilizado y, por supuesto, no pasarás la siguiente ITV hasta que legalices la situación o desmontes por completo la instalación.
