La Guardia Civil ha recordado que los pasajeros de un coche también tienen que cumplir con unas normas de tráfico. Y no es un tema menor, porque las multas pueden llegar a los 500 euros. La verdad es que muchos pasajeros viven en la feliz ignorancia de que las normas de tráfico solo afectan al conductor. Pero te sorprendería saber que tú, como acompañante, también puedes ser el objetivo de una sanción económica si no cumples con ciertas reglas. ¿Quieres saber en qué situaciones podrías ser multado y cómo evitarlo?
2Las infracciones más comunes que te pueden costar dinero como pasajero
Estas son algunas situaciones específicas en las que la Guardia Civil puede detener el coche y multar al pasajero. Presta atención, porque algunas son más obvias y otras quizás te pillen por sorpresa.
No usar el cinturón de seguridad
Sin duda, esta es la infracción más conocida y, a la vez, la más reincidente. Aunque parezca increíble, todavía hay muchas personas que creen que no es necesario abrocharse el cinturón en los asientos traseros o para trayectos cortos. ¡Nada más lejos de la realidad! El uso del cinturón de seguridad es obligatorio para todos los ocupantes del vehículo, sin excepción, tanto en vías urbanas como interurbanas.
La excusa de «es que voy detrás» o «es solo un momento» no sirve. En caso de accidente, el cinturón puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte o entre sufrir lesiones leves o graves. No llevarlo puesto no solo te pone en riesgo a ti, sino que también puede proyectarte contra otros ocupantes del vehículo, aumentando la gravedad de sus lesiones. La multa por no usar el cinturón de seguridad como pasajero es de 200 euros.
No usar los sistemas de retención infantil adecuados
Este punto es crucial y está muy relacionado con la seguridad de los niños. Si viajas con menores, debes asegurarte de que utilizan el sistema de retención infantil (SRI) adecuado para su peso y altura. Esto no es solo una recomendación, es una obligación legal a la que el instituto armado pone mucha atención.
Utilizar un SRI inadecuado, no usarlo en absoluto, o no instalarlo de forma correcta son infracciones graves. Si un agente de la Guardia Civil detecta que un menor no va bien protegido, la multa recaerá sobre el conductor del vehículo, quien es el responsable principal de la seguridad de los ocupantes. Sin embargo, es importante que, como pasajero adulto acompañante de un menor, seas consciente de la importancia de su uso y colabores para asegurar que el niño viaja seguro. La sanción económica para el conductor por esta infracción es de 200 euros y la retirada de 4 puntos del carné. Pero, como pasajero, es tu responsabilidad moral y a menudo también legal velar por el bienestar del menor.
Circular sin casco en una moto o ciclomotor
También es importante mencionar esta infracción que atañe a los pasajeros de vehículos de dos ruedas. Si viajas como acompañante en una motocicleta o ciclomotor, el uso del casco homologado es obligatorio. No llevarlo puesto no solo pone en riesgo tu vida en caso de caída o accidente, sino que también te enfrenta a que la Guardia Civil te ponga una multa.
Al igual que en el caso del cinturón en coches, la multa por no llevar el casco en moto como pasajero es de 200 euros. En este caso, la responsabilidad recae sobre el pasajero. Así que, antes de subirte a una moto, asegúrate de que tanto tú como el conductor lleváis el casco bien abrochado.
Ocupar un asiento que no te corresponde
Esta es una de esas infracciones que quizás no te esperabas. ¿Sabías que no puedes viajar en cualquier parte del coche? Es decir, no puedes ir en el maletero, ni en el regazo de otra persona, ni de pie en un vehículo en movimiento (salvo excepciones muy específicas en vehículos de transporte público habilitados para ello).
El Reglamento General de Circulación especifica que cada ocupante debe ir sentado en un asiento homologado. Viajar en una posición que no sea un asiento, o que no te permita utilizar los sistemas de seguridad, no solo es peligroso, sino también motivo de multa por parte de la Guardia Civil. Por ejemplo, ir dos personas en un mismo asiento si este no está diseñado para ello. La multa por ocupar un asiento de forma indebida o una zona no habilitada para pasajeros puede ser de hasta 100 euros.
Molestar al conductor o poner en peligro la seguridad vial
Esta categoría es un poco más amplia, pero engloba comportamientos que, como pasajero, pueden considerarse una distracción para el conductor o un peligro para la circulación. Aquí entran desde sacar parte del cuerpo por la ventanilla hasta arrojar objetos a la vía, o incluso tener comportamientos que impidan al conductor mantener el control del vehículo.
Por ejemplo, si te sacas el brazo o la cabeza por la ventanilla mientras el coche está en marcha, no solo corres el riesgo de sufrir lesiones graves, sino que también puedes ser multado por la Guardia Civil. De igual forma, si con tus acciones o movimientos distraes al conductor de tal manera que ponga en peligro la conducción, la multa puede recaer sobre ti. La cuantía de estas sanciones puede variar dependiendo de la gravedad, pero pueden llegar a los 500 euros.
Arrojar objetos a la vía pública
Aunque esta infracción suele asociarse más a los conductores (por ejemplo, tirar una colilla), los pasajeros también pueden ser responsables de ella. Arrojar cualquier objeto desde el vehículo a la vía pública es una acción muy peligrosa. Un simple objeto puede convertirse en un proyectil para otros vehículos, causar un accidente o incluso un incendio (en el caso de colillas encendidas).
Esta infracción no solo tiene un componente de seguridad vial, sino también medioambiental. Si como pasajero te ven arrojando algo por la ventanilla, la multa puede ser de hasta 200 euros y la retirada de 4 puntos al conductor si es él quien lo hace, pero si se identifica al pasajero como el responsable, la multa recaerá sobre él.
