El precio del combustible es una de las preocupaciones constantes de los conductores en España. Con el aumento de los costes energéticos, las fluctuaciones del petróleo y la llegada masiva de vehículos eléctricos e híbridos, la pregunta que muchos se hacen es sencilla pero crucial: ¿qué opción es realmente más barata para recorrer 100 km? ¿gasolina, diésel o electricidad?
No se trata solo de mirar el precio que marca el surtidor o la factura eléctrica, sino de calcular el gasto real que supone mover el coche esa distancia. Factores como el consumo medio del vehículo, la tarifa eléctrica contratada o incluso la disponibilidad de puntos de recarga pueden cambiar mucho el resultado final.
Un reciente análisis, elaborado con datos de AEDIVE (Asociación para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica) y del Ministerio para la Transición Ecológica, ha puesto cifras actualizadas a esta cuestión. Y aunque muchos podrían pensar que la respuesta es obvia, los resultados muestran matices interesantes que pueden ayudarte a decidir qué coche conviene más a tu bolsillo.
2GNC y diésel: segundo y tercer clasificados

El gas natural comprimido (GNC) ocupa la segunda posición. AEDIVE calcula que recorrer 100 km con este combustible cuesta 4,73 €, tomando como referencia un precio de 1,23 €/kg y un consumo medio de 3,84 kg/100 km. Este tipo de combustible ha sido popular en algunos modelos urbanos y compactos, como el Seat Ibiza TGI o el Volkswagen Polo TGI, aunque su principal limitación es la escasez de gasineras en muchas zonas de España.
En tercer lugar encontramos el diésel, con un coste de 6,89 €/100 km según los cálculos de AEDIVE, usando un precio medio de 1,43 €/l y un consumo de 4,82 l/100 km. El diésel, a pesar de su pérdida de protagonismo en ventas, sigue siendo muy competitivo en recorridos largos por su menor consumo específico y por la amplia red de estaciones de servicio en todo el país.