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La única forma correcta de aparcar tu coche automático y no destrozar su caja de cambios

La transmisión es uno de los componentes más importantes y a la vez más caros de nuestro coche. Mantenerla en buen estado y cuidarla con sencillos gestos, especialmente al aparcar, es fundamental para que su vida útil sea lo más larga posible. A pesar de que la fiabilidad de los coches actuales ha mejorado gracias a los avances tecnológicos y en los procesos de fabricación, la mayor complejidad de algunos componentes sigue siendo un reto para muchos conductores. Esto es particularmente cierto para la caja de cambios automática, un sistema delicado y costoso que requiere de cuidados específicos.

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El método correcto para aparcar tu coche automático

Además del mantenimiento regular, es crucial seguir un método correcto al aparcar un vehículo con caja de cambios automática. El procedimiento no solo evitará daños a la transmisión, sino que también mejorará la seguridad del automóvil al estacionar. La manera adecuada de aparcar un coche automático sin poner en riesgo la caja de cambios es:

  1. Detén completamente el vehículo y cambia la palanca de cambios a la posición N (neutro). Esto evita que la transmisión está bajo tensión cuando se active el freno de estacionamiento. Pasar directamente de D (drive) a P (parking) sin detenerse en N puede causar estrés innecesario en la caja de cambios.
  2. Una vez esté en neutro, activa el freno de estacionamiento. Este paso asegura que el vehículo se mantenga inmóvil al aparcar, evitando que la transmisión soporte el peso del coche.
  3. Suelta el freno de pie para que el coche se apoye completamente en el freno de estacionamiento. Es fundamental para evitar que la transmisión soporte cargas adicionales.