La tecnología ha revolucionado nuestro día a día, incluso nuestros coches, y los ladrones han aprendido a usarla en su beneficio. Ahora pueden robar un vehículo sin siquiera tocarlo, interceptando la señal inalámbrica de las llaves actuales. Pero hay una manera de cortarles el paso, guardándolas en un electrodoméstico de lo más común en cualquier cocina: el microondas.
Un aparato para calentar la cena o hacer palomitas, ¿la solución? No, no es broma ni la última ocurrencia en internet. Por su estructura y materiales, el microondas funciona como barrera contra la captación de señales. Lo que antes era solo un electrodoméstico más, ahora es una especie de caja fuerte improvisada para evitar que te roben el coche mientras duermes o ves una serie.
3El microondas: tu nuevo guardián del garaje
El microondas tiene una estructura metálica cerrada que impide que las ondas electromagnéticas salgan al exterior del aparato. Por eso, por ejemplo, no te quemas al calentar comida. Y justamente esa capacidad para bloquear ondas convierte al electrodoméstico en un escudo natural frente a los intentos de captar señales electrónicas. Es, en pocas palabras, una caja fuerte perfecta para las llaves de tu coche.
Otro electrodoméstico que te puede servir para poner a salvo tus llaves es la nevera, pero su capacidad para bloquear señales no es tan eficiente como la del microondas. Además, si tienes el ‘micro’ en una zona menos accesible o con menos tránsito, dificulta aún más el trabajo de los ladrones. Y en seguridad, cualquier capa extra puede marcar la diferencia.
