Hace unas semanas, la Guardia Civil de Tráfico ‘cazó’ de lleno a un conductor que pensó que podía circular con su coche con total impunidad. Le pillaron en un control móvil duplicando la velocidad máxima permitida de la vía, pero lo peor es que los agentes se llevaron otra sorpresa cuando le dieron el alto.
Esto ocurrió en uno de los controles por carretera que la Guardia Civil ha desplegado en las últimas semanas con motivo de las operaciones especiales por los desplazamientos de verano.
La doble imprudencia que captó la Guardia Civil en Teruel

La Guardia Civil está presente en autovías, autopistas y en carreteras secundarias, que de hecho es donde se producen la mayor parte de los accidentes mortales. En este caso, los agentes montaron un control móvil en la N-211, a la altura de Monreal del Campo (Teruel), y ‘cazaron’ a un vehículo que circulaba a 188 km/h, más del doble del límite permitido en estas carreteras (90 km/h). Una velocidad que, por sí misma, ya habría convertido a la maniobra en una infracción muy grave, pero lo peor es que no se quedó ahí.
Lógicamente, después de circular a esta velocidad, la Guardia Civil activó el procedimiento de persecución y detención. No les costó dar el alto al conductor, pero la sorpresa llegó cuando le pidieron que se identificara.
Al comprobar los datos del conductor, la Guardia Civil descubrió que le habían retirado del permiso de conducir por haber agotado todo el saldo de puntos. De esta manera, se considera un delito tipificado por el Código Penal.
Tras la identificación, la Guardia Civil instruyó diligencias y remitió el caso al Juzgado de Instrucción de Calamocha para iniciar el procedimiento judicial correspondiente.
¿A cuánto asciende la multa y qué se considera delito?

Los delitos a los que se enfrenta el conductor están claramente recogidos en el Código Penal. Por un lado, el artículo 379 tipifica como delito conducir a una velocidad superior en 80 km/h a la permitida en vías interurbanas, con penas que incluyen prisión de tres a seis meses, multas de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad, además de la privación del derecho a conducir entre uno y cuatro años.
Por otro lado, el artículo 384 contempla sanciones para quienes circulen sin permiso de conducir, como es el caso de este conductor en Teruel. Las penas son similares: prisión, multa o trabajos comunitarios, reflejando la gravedad de conducir sin autorización legal.
Además de las consecuencias penales, el exceso de velocidad implica multas económicas y pérdida de puntos, según la Ley de Tráfico. En carreteras limitadas a 90 km/h, circular a más de 161 km/h supone la máxima sanción: 600 euros y 6 puntos menos. La velocidad de 188 km/h que ha detectado la Guardia Civil sitúa al infractor en el extremo más grave.
Tipo de vía | Límite de velocidad | Multa (€) | Puntos |
---|---|---|---|
Carreteras interurbanas | 91–120 km/h | 100 | 0 |
Carreteras interurbanas | 121–140 km/h | 300 | 2 |
Carreteras interurbanas | 141–150 km/h | 400 | 4 |
Carreteras interurbanas | 151–160 km/h | 500 | 6 |
Carreteras interurbanas | >161 km/h | 600 | 6 |
Autovías y autopistas | 121–140 km/h | 100 | 0 |
Autovías y autopistas | 141–160 km/h | 300 | 2 |
Autovías y autopistas | 161–180 km/h | 400 | 4 |
Autovías y autopistas | 181–200 km/h | 500 | 6 |
Autovías y autopistas | >200 km/h | 600 | 6 |
Precisamente para evitar que los conductores sobrepasen los límites de velocidad, la Guardia Civil incrementa los controles móviles en épocas especiales y en carreteras con una alta siniestralidad. Y por eso también la Dirección General de Tráfico (DGT) va a instalar 122 nuevos radares durante todo este 2025 (la mayoría ya están activos).