La Dirección General de Tráfico (DGT) sigue apostando por la innovación tecnológica para mejorar la seguridad vial en España. Su última novedad son los alcoholímetros avanzados que no requieren que los conductores soplen directamente en el dispositivo, transformando la forma en que se realizan los controles de alcoholemia.
Esta medida busca no solo optimizar la labor de los agentes de tráfico, sino también garantizar una experiencia más cómoda y eficiente para los conductores, reduciendo tiempos y mejorando la higiene de los procedimientos.
3Cómo influye en la seguridad vial
La DGT espera que esta tecnología tenga un impacto significativo en la reducción de accidentes relacionados con el consumo de alcohol. Al permitir realizar más controles en menos tiempo, se incrementa la disuasión hacia aquellos que consideran conducir bajo los efectos del alcohol, reforzando la percepción de vigilancia en las carreteras.
Además, el hecho de que los controles sean más rápidos y cómodos fomenta una mayor colaboración por parte de los conductores, quienes ahora ven el proceso como menos invasivo y molesto. Este cambio cultural es fundamental para promover la responsabilidad al volante.