La DGT se ha puesto por fin del lado de los conductores para ayudarles a ahorrar en combustible. Ha desvelado una serie de trucos y consejos que, aplicados en tu día a día, pueden hacer que tu bolsillo respire un poco más tranquilo cuando te pones al volante. Seguro que te pica la curiosidad por saber cuáles son las recomendaciones de este organismo, ¿verdad?
El ahorro de combustible, una prioridad
Vivimos en una época en la que la sostenibilidad y la eficiencia son más importantes que nunca, y el ahorro de combustible no es solo una cuestión económica. También es un gesto a favor del medio ambiente. Consciente de esta doble vertiente, la Dirección General de Tráfico ha querido ir más allá de su rol tradicional con los trámites y ofrecer una guía práctica para que los conductores puedan reducir su consumo de gasolina. No se trata de fórmulas mágicas ni innovadoras, sino de aplicar el sentido común y adoptar ciertos hábitos al volante.
2Un buen mantenimiento del vehículo, aliado en el ahorro
Además de tus hábitos al volante, el estado de tu vehículo influye en el consumo de gasolina. Un coche bien mantenido es un coche eficiente. La DGT también nos da las claves en este aspecto.
Los neumáticos con una presión inferior a la recomendada aumentan la resistencia a la rodadura, lo que obliga al motor a trabajar más y, por tanto, a consumir más combustible. Se estima que una presión inadecuada puede aumentar el consumo entre un 2% y un 4%. Revisa la presión de tus neumáticos al menos una vez al mes y siempre antes de emprender un viaje largo.
Sigue siempre las recomendaciones del fabricante en cuanto a las revisiones y el mantenimiento de tu vehículo. Un buen mantenimiento preventivo no solo te ahorrará dinero en combustible, sino que también prolongará la vida útil de tu coche y evitará averías costosas. Piensa en ello como una inversión: gastar un poco en mantenimiento te ahorrará mucho más a largo plazo.
¿Eres de los que llevan el maletero lleno de cosas «por si acaso»? Cada kilo extra que llevas en el coche implica un esfuerzo adicional del motor para moverse, lo que se traduce en un mayor consumo de gasolina. Vacía el maletero de objetos innecesarios, y si no utilizas la baca, desmóntala. Aunque parezca insignificante, la resistencia aerodinámica que genera una baca vacía también afecta al consumo.
