La DGT ha puesto en marcha una de las mayores actualizaciones del catálogo de señales en décadas, y conocerla es una obligación para todos los conductores. Muchas señales ya forman parte del paisaje y el cerebro las interpreta en piloto automático. Pero desde este mismo mes de julio muchas de esas señales han cambiado para siempre. Además han aparecido otras nuevas que, si no identificas a tiempo, podrían llevarte a cometer una infracción sin siquiera darte cuenta.
Sigue leyendo, porque si no quieres llevarte una sorpresa, lo que te vamos a contar te interesa, y mucho. Estos son los cambios que ya están en vigor y que forman parte de nuestro día a día.
5Señales que se modernizan

Este es uno de los cambios más comentados. La DGT ha revisado los pictogramas para eliminar roles de género. El ejemplo más claro es la famosa señal de peligro P-21, que alerta de la proximidad de un colegio. En su versión anterior, una figura masculina llevaba de la mano a una femenina, más pequeña. En el nuevo diseño, es la figura femenina la que tira de la masculina. Este mismo principio se aplica a otras señales. Por ejemplo, en las que indican zonas peatonales o de coexistencia, ya no será solo una mujer la que empuje un carrito de bebé, sino que podrá ser una figura masculina.
Otras señales han cambiado para que puedas verlas y entenderlas mejor y más rápido. La icónica señal de STOP ha modificado un poco su tipografía y tamaño para potenciar su legibilidad, sobre todo en condiciones de baja visibilidad. La señal P-22, que alerta del peligro por un paso de ciclistas, abandona su estética «retro» por un diseño más moderno y claro, con una bicicleta de formas más reconocibles. Lo mismo ocurre con la señal P-8, de peligro por paso a nivel sin barreras, que ahora presenta un pictograma de un tren más actual. El objetivo es simple: que no quede ni la más mínima duda de lo que significa cada señal en el menor tiempo posible.