Miles de conductores se van de vacaciones este mes, pero no todos los que salen de viaje lo hacen en su coche particular. Y es inevitable sentir cierta preocupación de si todo estará en orden a la vuelta, la inquietud de ver el aparcamiento vacío, una multa o una sorpresa desagradable. Y la verdad es que esa preocupación no es infundada. Dejar el coche parado en el mismo sitio durante un periodo prolongado puede acarrear más problemas de los que imaginas, y no solo hablamos de una simple batería descargada.
Vamos a analizar lo que puede ocurrirle a tu vehículo si no prestas atención a este detalle para planificar mejor tus ausencias.
¿Cuánto tiempo aparcado es demasiado? o que dice la ley

La Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial es clara al respecto. No puedes dejar tu coche aparcado de forma indefinida en el mismo sitio. Existe un límite, y superarlo puede tener consecuencias. De forma general, la normativa establece que un vehículo no puede permanecer estacionado en el mismo lugar de la vía pública por un periodo superior a un determinado número de días. Este periodo, aunque puede variar según la ordenanza municipal de cada ayuntamiento, suele rondar los quince días. Puede parecer mucho o poco, dependiendo de tus hábitos, pero es un plazo que se puede alcanzar con facilidad si tus vacaciones son un poco más largas de lo habitual.
Esta norma no busca solo evitar la imagen de coches abandonados o el colapso de las zonas de aparcamiento, sino que también tiene implicaciones en la seguridad vial y en la gestión del espacio público. Un coche que lleva mucho tiempo aparcado puede convertirse en un estorbo, dificultar la limpieza de las calles o, en el peor de los casos, ser objeto de vandalismo o servir de refugio para actividades ilícitas.
Hay una serie de señales que alertan a las autoridades de que un vehículo podría estar en situación de abandono o haber superado el límite de estacionamiento. Algunas de las más destacadas son:
- Acumulación de suciedad: Si tu coche empieza a acumular una capa considerable de polvo, hojas, o incluso telarañas, es un claro indicativo de que lleva tiempo sin moverse.
- Neumáticos desinflados o en mal estado: Un neumático deshinchado es una señal evidente de inactividad prolongada.
- Cristales rotos o lunas empañadas: Si los cristales están sucios por dentro o por fuera de forma excesiva, o si están rotos, es otra bandera roja.
- Elementos exteriores dañados o faltantes: Espejos rotos, parachoques descolgados, o la ausencia de matrículas pueden indicar que el vehículo no está siendo atendido.
- Pegatinas o avisos de la autoridad: Antes de tomar medidas drásticas, es común que las autoridades dejen un aviso en el parabrisas indicando que el vehículo puede ser retirado si no se mueve en un plazo determinado. Si encuentras uno de estos, ¡no lo ignores!
Las consecuencias de un aparcamiento prolongado

La primera consecuencia de superar el tiempo máximo de estacionamiento es que tu coche puede ser retirado por la grúa municipal. Esto implica, para empezar, una multa considerable. La cuantía de la multa varía según la ordenanza municipal, pero puede suponer un buen pellizco a tu bolsillo. Además de la multa, tendrás que pagar las tasas de la grúa y las de depósito por cada día que tu coche permanezca en el depósito municipal.
Si el vehículo es retirado y nadie lo reclama en un plazo determinado, o si las autoridades consideran que está en un estado de abandono total, puede ser declarado vehículo abandonado. Esto tiene consecuencias aún más serias, como ser desguazado y dado de baja definitivamente en la DGT. No solo te quedarías sin coche, sino que el proceso puede acarrear también sanciones adicionales por el abandono del vehículo.
También te puedes encontrar con que se han notificado prohibiciones debido a obras en la calle en la que tienes aparcado el coche. Como estás de vacaciones, no has visto los avisos y, por tanto, volveríamos al primer punto de la grúa.
Cómo evitar sustos y mantener tu coche a salvo estas vacaciones

Si tu intención es irte de vacaciones y dejar el coche aparcado en la calle, ten en cuenta estos consejos para evitar llevarte una sorpresa a la vuelta:
- No superes el límite de tiempo: Si sabes que vas a estar más de los quince días que marcan las ordenanzas municipales (o menos, si tu ayuntamiento tiene un límite más estricto), busca una alternativa.
- Garaje o parking de larga estancia: La opción más segura es, sin duda, dejarlo en un garaje privado o en un parking de larga estancia. Aquí tu coche estará protegido de robos, vandalismo y de las multas por estacionamiento prolongado.
- Pide ayuda a un familiar o amigo: Si no tienes un garaje, ¿podría un familiar o amigo mover tu coche de vez en cuando? Con moverlo unos metros o cambiarlo de sitio dentro de la misma zona de aparcamiento, ya sería suficiente para evitar que sea considerado un estacionamiento prolongado. Además, podrían arrancarlo y dar una pequeña vuelta para evitar problemas mecánicos.
- Revisa la presión de los neumáticos: Antes de dejarlo, asegúrate de que los neumáticos tienen la presión adecuada, o incluso un poco más, para minimizar el riesgo de deformación.
Como ves, dejar el coche aparcado demasiado tiempo en el mismo sitio no es una cuestión poco importante. Así que la próxima vez que salgas de vacaciones piensa en tu coche y toma las precauciones necesarias. Tu tranquilidad y tu bolsillo te lo agradecerán.