¿Te has parado a pensar en lo que llevas en el maletero de tu coche? A menudo nos limitamos a meter toda la carga a la ligera, sin darle mucha importancia, y salimos a la carretera. Pero la realidad es que muchos conductores pasan por alto un detalle crucial que no solo influye en la seguridad, sino que también te puede suponer una multa: el reparto adecuado de la carga. Aquí tienes todo lo que necesitas saber para viajar seguro, evitar sanciones y, de paso, aprender a optimizar el espacio de tu coche como un auténtico profesional.
Más allá de una cuestión de espacio

Cuando nos preparamos para un viaje, ya sea unas vacaciones o una simple escapada de fin de semana, solemos pensar en la gasolina, el itinerario y la música. Sin embargo, hay un factor que a menudo ignoramos y que es fundamental para la estabilidad y el comportamiento de nuestro coche: la distribución del peso.
El coche es como una balanza. Si pones mucho peso en un solo lado, se desequilibra. Un reparto de la carga incorrecto puede modificar el centro de gravedad del coche, lo que afecta a la forma en que se comporta en la carretera. Esto se nota sobre todo en las curvas, al frenar y en las maniobras de esquiva. Si el peso está mal distribuido, el coche puede volverse inestable, y la dirección o los frenos no responderán como deberían.
Cuando el coche está vacío, el centro de gravedad se encuentra en un lugar diseñado por los ingenieros para que el vehículo sea lo más estable posible. Sin embargo, al llenarlo de equipaje, personas y otros objetos, este punto se desplaza.
Si colocas la carga más pesada en la parte alta del maletero o en la baca del techo, el centro de gravedad se eleva. Esto significa que el coche tendrá más tendencia a balancearse en las curvas, lo que puede hacer que pierdas el control sobre todo en las curvas. Por el contrario, si la carga pesada va en la parte baja y cerca del centro del coche, el centro de gravedad se mantiene bajo, lo que mejora la estabilidad y la adherencia del vehículo a la carretera.
Manual para distribuir la carga como un profesional

Siempre debes colocar los objetos más pesados en el fondo del maletero y lo más cerca posible del respaldo de los asientos traseros. Esto ayuda a mantener el centro de gravedad bajo y centrado. Maletas grandes y pesadas, cajas con herramientas o cualquier otro objeto voluminoso y denso deben ser los primeros en entrar. Al hacerlo, estás minimizando el impacto en la estabilidad del vehículo y asegurando que su comportamiento sea lo más parecido posible al de un coche vacío.
Además, fija la carga para que no se mueva. Un objeto suelto en el maletero puede convertirse en un proyectil en caso de frenazo brusco o accidente. Rellena los huecos con objetos más blandos como bolsas de ropa, almohadas o mantas. Si tienes redes de sujeción o cinchas, úsalas para asegurar los bultos. La DGT es muy estricta con esto, y si la carga no va bien sujeta, puede caerte una multa importante.
Pero no solo importa la distribución de adelante hacia atrás, sino también de lado a lado. Trata de repartir el peso de manera uniforme a ambos lados del maletero. Si pones todo el peso en un solo lado, el coche se inclinará, lo que afectará a la suspensión y la dirección.
A veces, el maletero no es suficiente y necesitamos usar los asientos de atrás para llevar cosas. Si lo haces, nunca coloques objetos pesados o duros en la bandeja trasera, ya que en un frenazo podrían salir disparados hacia los pasajeros. Lo ideal es que, si llevas algo en el asiento trasero, sea algo blando como un abrigo o una bolsa de mano, y que lo coloques en el suelo del coche, detrás de los asientos delanteros si es posible. Si es algo más grande, asegúrate de sujetarlo con el cinturón de seguridad.
La baca del coche es una solución muy práctica para llevar equipaje extra, bicicletas o esquís. Sin embargo, es donde más cuidado debemos tener. Como ya te dijimos, poner peso en el techo eleva el centro de gravedad del coche, lo que lo hace mucho más inestable. No excedas el peso máximo, pon lo más ligero arriba y asegura la carga a conciencia.
Carga que sobresale y otras situaciones: Lo que dice la DGT

La normativa de tráfico es muy clara en cuanto a la carga que sobresale del coche. Por lo general, en un turismo no se puede llevar carga que sobresalga por delante. Por los lados, puede sobresalir hasta 40 cm de cada lado, siempre que el ancho total no supere los 2,55 metros, y por detrás, hasta un 10% de la longitud total del coche. Si la carga es indivisible, este porcentaje puede llegar hasta el 15%. En cualquier caso, si la carga sobresale por detrás, debes señalizarla con una señal V-20. De no hacerlo, te arriesgas a una multa que puede ser bastante considerable.
Con el coche cargado, la presión de los neumáticos debe ser mayor. Si no tienen la presión adecuada, el coche se agarra peor a la carretera, los frenos son menos efectivos y el riesgo de reventón aumenta. Revisa el manual de tu coche o la pegatina que suele estar en la puerta del conductor o en la tapa del depósito. Allí encontrarás la presión recomendada para cuando el coche va con carga. No te olvides de este detalle, es crucial para tu seguridad.
Como ves, cargar el coche no es solo cuestión de meter equipaje. Es un acto que influye directamente en tu seguridad, la de tus acompañantes y la de los demás usuarios de la vía. Unos minutos dedicados a organizar el maletero de forma correcta, a asegurar la carga y a revisar la presión de los neumáticos pueden evitar un susto y, de paso, una multa.