La edad media de los coches en nuestro país es de 14,5 años y solo hay cuatro comunidades autónomas que tienen un parque de vehículos renovado, que no supera esta media: Madrid (11,5 años), Cataluña (14,1 años), Comunidad Valenciana (14,2 años) y Baleares (14,2 años).
En el lado contrario de la balanza se sitúan sobre todo Ceuta y Melilla, que con 17,7 años de antigüedad tienen el parque de coches más envejecido de todos. A las ciudades autónomas le siguen con los automóviles más viejos, Castilla y León, con 16,6 años de media, y Extremadura y Galicia, con 16,3 años de antigüedad.
Son algunos de los datos que incluye el Informe Anual 2024, elaborado por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), que constata que 6 de cada diez coches que circulan por España tiene más de 10 años de antigüedad, lo que tiene consecuencias sobre el medio ambiente y también sobre la seguridad vial.
En concreto, del total de coches que circulaban por España en 2024, el 62,8% tenía más de 10 años de antigüedad, lo que supone más de 16,6 millones de turismos sobre los 26,47 millones que hay en circulación. Y de estos, el 48,8% supera la edad media nacional, con más de 15 años (12,9 millones de unidades).
Las cifras de envejecimiento del parque de turismos son similares a las que presentan los vehículos comerciales, con el 49,3% (2,05 millones de un total de 4,15 millones) y los vehículos industriales, con el 50,3% (309.996 frente a un total de 616.878 vehículos) superando la edad media nacional.
Para José López-Tafall, director general de ANFAC, el envejecimiento del parque no es una buena noticia. Y señala dos motivos: «En primer lugar, por el medioambiente, ya que supone unas mayores emisiones globales de las que podría tener un parque más renovado. En segundo lugar, un parque envejecido supone un mayor riesgo para la seguridad en nuestras carreteras, ya que cuanto más nuevo es un coche, más seguro puede llegar a ser».
Coches que superan los 10 años de antigüedad
Según los datos de ANFAC, hay hasta ocho comunidades autónomas donde siete de cada diez coches en circulación superan los 10 años de antigüedad. Los responsables del estudio destacan sobre todo el caso de Ceuta y Melilla, donde el 76,3% de los turismos (es decir, prácticamente 8 de cada 10) supera esta edad media. Castilla y Léon, Extremadura, Galicia, Asturias, La Rioja, Castilla-La Mancha y Navarra le siguen en este ranking.
En el lado contrario estaría Madrid que, además de ser el principal mercado en España es la comunidad que tiene una mayor renovación de vehículos y donde solo el 48,3% de los coches en circulación tiene más de 10 años de antigüedad. Cataluña, Baleares, Comunidad Valenciana o Canarias se sitúan también por debajo de la media nacional, que registra el 62,8% de turismos de esta edad.
Electrificación desigual del parque
Otro de los apartados que analiza ANFAC en su informe es la electrificación del parque móvil. A finales de 2024, circulaban en nuestro país un total de 31.301.881 vehículos (turismos, comerciales, industriales y autobuses). De ellos, 494.967 eran electrificados (híbridos enchufables o eléctricos puros), lo que supone un incremento del 35% respecto al año anterior. A pesar de esta subida, los vehículos electrificados solo representan el 1,6% del parque total en circulación, 4 décimas más que en 2023.
Si buscamos los datos de las comunidades autónomas, solamente Madrid supera la media nacional en más de 2,4 puntos porcentuales, con el 4,1% de su parque de coches electrificado. A esta región le siguen completando el podio Cataluña, con el 1,7%, y Baleares, con el 1,5% del parque electrificado.
El resto de comunidades autónomas todavía muestran una baja presencia de vehículos electrificados en sus respectivos parques circulantes. Y de nuevo Ceuta y Melilla vuelven a ser el farolillo rojo, con solo el 0,4% y el 0,5%, respectivamente, de vehículos eléctricos puros e híbridos enchufables presentes en sus carreteras.
A la vista de los datos, José López-Tafall, director general de ANFAC, señala la necesidad urgente de renovación del parque automovilístico y sigue insistiendo en que conseguirlo se debe continuar con los incentivos a la compra «preferentemente a través de un nuevo modelo más sencillo y directo basado en la fiscalidad, y garantizar tanto su eficiencia como continuidad en el tiempo». Para López-Tafall «es necesario dar certidumbre al usuario y mandar un mensaje claro: cualquier vehículo nuevo, sea cual sea su tecnología, siempre será más seguro, eficiente y sostenible que un vehículo de más de 10 años.”
