Comprar un coche de segunda mano puede parecer una excelente manera de ahorrar dinero, pero también es una operación que encierra más riesgos de los que imaginamos. Uno de los fraudes más comunes en este tipo de transacciones es la manipulación del cuentakilómetros, una práctica que sigue muy presente en el mercado español. Un reciente estudio publicado por Carly, la app de diagnóstico automotriz, revela datos alarmantes: uno de cada doce coches usados en España circula con los kilómetros alterados. Y lo más preocupante es que tres marcas destacan por encima del resto en este tipo de engaños.
El estudio, basado en miles de inspecciones realizadas con la herramienta Carly, señala a Mercedes-Benz, Volkswagen y SEAT como las marcas con mayor incidencia de kilometraje manipulado. Este tipo de fraude puede inflar el valor del coche hasta en 2.000 euros por cada 100.000 kilómetros borrados, sin mencionar los riesgos mecánicos ocultos que conlleva. Si tienes un coche de alguna de estas marcas y no verificaste su historial al comprarlo, es posible que hayas pagado mucho más de lo que realmente valía.
3Seat, la marca nacional también está en el punto de mira

El tercer puesto lo ocupa SEAT, con un preocupante 14,24 % de casos de fraude de kilometraje detectados. La marca española, muy presente en el parque automovilístico nacional y conocida por sus precios accesibles, tampoco se libra de estas prácticas. En particular, modelos como el Ibiza y el León son especialmente frecuentes en el mercado de segunda mano.
Estos coches, que suelen ser adquiridos por conductores jóvenes o como primer vehículo, son a menudo usados intensamente. Algunos vendedores sin escrúpulos aprovechan esto para “rejuvenecer” artificialmente el coche y venderlo a un precio más alto. Como consecuencia, los compradores no solo pagan más, sino que también se enfrentan a posibles averías mecánicas prematuras por el desgaste real no reflejado en el cuentakilómetros.