Comprar un coche de segunda mano puede parecer una excelente manera de ahorrar dinero, pero también es una operación que encierra más riesgos de los que imaginamos. Uno de los fraudes más comunes en este tipo de transacciones es la manipulación del cuentakilómetros, una práctica que sigue muy presente en el mercado español. Un reciente estudio publicado por Carly, la app de diagnóstico automotriz, revela datos alarmantes: uno de cada doce coches usados en España circula con los kilómetros alterados. Y lo más preocupante es que tres marcas destacan por encima del resto en este tipo de engaños.
El estudio, basado en miles de inspecciones realizadas con la herramienta Carly, señala a Mercedes-Benz, Volkswagen y SEAT como las marcas con mayor incidencia de kilometraje manipulado. Este tipo de fraude puede inflar el valor del coche hasta en 2.000 euros por cada 100.000 kilómetros borrados, sin mencionar los riesgos mecánicos ocultos que conlleva. Si tienes un coche de alguna de estas marcas y no verificaste su historial al comprarlo, es posible que hayas pagado mucho más de lo que realmente valía.
2Volkswagen, segunda en la lista de riesgo

Volkswagen ocupa el segundo puesto en esta preocupante clasificación, con un 16,08 % de vehículos inspeccionados que presentan discrepancias en el cuentakilómetros. Modelos populares como el Golf, el Passat o el Tiguan son frecuentes en el mercado de ocasión, lo que los convierte en objetivos comunes para el fraude. Su presencia masiva y su buena reputación juegan en contra del comprador desprevenido.
Aunque Volkswagen cuenta con sistemas electrónicos avanzados, aún es posible manipular sus lecturas de kilometraje si se dispone del equipo adecuado. El problema es que muchos compradores, especialmente particulares, no disponen de las herramientas ni del conocimiento para detectar este tipo de alteraciones. Por eso, es fundamental realizar un diagnóstico previo y verificar el historial del vehículo con sumo cuidado.