En la mayoría de los casos, las posibilidades de recuperarlo dependen de la rapidez con la que se actúe y de la tecnología disponible para localizarlo. En las zonas rurales, el problema se agrava: la distancia entre poblaciones y la falta de vigilancia hacen que un tractor, un todoterreno o cualquier vehículo agrícola sea un blanco fácil para los ladrones.
Sin embargo, hay ocasiones en las que el ingenio y la prevención se convierten en el mejor seguro. Y eso es exactamente lo que ocurrió en Boves, Italia, donde un agricultor consiguió recuperar su tractor en cuestión de minutos gracias a un dispositivo GPS… que ni siquiera había sido diseñado para vehículos. Lo más sorprendente es que este aparato nació para proteger colmenas de abejas y, aun así, se convirtió en una herramienta de rescate perfecta. Eso sí, no es un equipo con el que cualquiera debería trastear a menos de 100 m si no sabe lo que está haciendo.
3Por qué estos GPS “para abejas” son tan interesantes
Lo que diferencia a este tipo de dispositivos frente a los rastreadores convencionales para coches es su capacidad de trabajar en entornos hostiles. Las colmenas suelen estar en zonas alejadas de núcleos urbanos, expuestas a humedad, polvo, vibraciones y temperaturas extremas. Por eso, los GPS de apicultura se diseñan para ser compactos, discretos y resistentes, con carcasas selladas y baterías que pueden durar semanas o meses.
Algunos modelos incluyen sensores que avisan de cualquier cambio de posición, de peso o incluso de la apertura de la colmena. Esta versatilidad es la que permitió que, sin adaptaciones complejas, un agricultor pudiera ocultarlo en su tractor y aprovechar su señal para localizarlo al instante tras el robo. Además, el coste es notablemente inferior al de los sistemas de rastreo profesionales que usan empresas de transporte o flotas de maquinaria.
