Durante años, quien soñaba con tener un coche clásico en perfectas condiciones debía enfrentarse al reto de buscar piezas imposibles en desguaces, recorrer ferias de repuestos y confiar en la suerte para encontrar carrocerías sin oxidar. Restaurar un vehículo histórico era un proyecto de amor y paciencia, cuyo coste muchas veces superaba con creces el valor de mercado del coche.
Pero los tiempos han cambiado y, con ellos, la manera de entender la pasión por los coches de época. Hoy ya no hace falta buscar por talleres de medio mundo ni pasar años detrás de una pieza original. Ahora, una empresa china promete hacer realidad el sueño de volver a conducir un clásico con solo un clic en su página web.
4¿Un futuro para el coche clásico?
El mercado del coche clásico está en plena transformación. Hasta hace poco, la única manera de disfrutar de un vehículo histórico era heredar uno, pagar precios astronómicos en subastas o dedicar años a restaurarlo. Ahora, empresas como Carbody ponen en jaque esa dinámica. ¿Por qué dejar que un 240Z siga oxidándose en un garaje cuando se puede comprar uno recién fabricado en China?
Cierto es que estos ‘nuevos clásicos’ no tienen número de bastidor histórico ni la bendición de las marcas originales. Pero, para una nueva generación de aficionados, lo importante es vivir la experiencia de tener uno, conducirlo y presumirlo. El debate está abierto: ¿estamos ante el paraíso del tuning, o el inicio del fin de la autenticidad?
