A veces, el destino ideal para unas vacaciones inolvidables solo está a unas horas por carretera. A poco más de 500 kilómetros de Madrid, se encuentra una joya del sur de Europa donde brilla el sol, las playas son de postal y el presupuesto apenas se resiente. Hablamos de la encantadora ciudad de Faro.
La capital del Algarve portugués destaca por su belleza natural y ambiente relajado, pero también por ser una de las opciones más económicas para unas vacaciones sobre ruedas. En ella, dormir bajo las estrellas, despertar frente al mar y recorrer paisajes de ensueño cuesta sorprendentemente poco. Si estás buscando una escapada sin grandes gastos, apunta bien este destino: puede ser tu mejor viaje del año.
3Naturaleza en estado puro: más allá de la ciudad
Para los que buscan experiencias más pausadas, la Ría Formosa es una joya natural entre marismas, canales y pueblos blancos. Una zona protegida ideal para ver aves, hacer rutas en bici o descubrir islas como la Ilha Deserta. Las ciudades de Tavira, Olhão y Santa Luzia son paradas obligatorias. En ellas, podrás pernoctar en espacios tranquilos y bien equipados, perfectos para disfrutar de la naturaleza sin prisas.
Si te apetece cambiar la brisa marina por el fresco aire de la montaña, la Serra de Monchique te espera con sus paisajes verdes, miradores espectaculares y ambiente rural. Este recorrido interior te llevará por carreteras panorámicas hasta Caldas y Fóia, el punto más alto del Algarve. Allí podrás descansar en campings como el de Monchique, rodeado de castaños, con sombra, vistas y todas las comodidades que necesitas.
