En una sorprendente escena digna de una película de acción, un enorme camión Mercedes-Benz Actros arrastró durante varios metros a un diminuto Citroën Ami en las calles de Turquía. Lo que inicialmente parecía un choque catastrófico entre David y Goliat, terminó siendo un incidente sin mayores consecuencias para ninguno de los dos vehículos.
Este curioso evento ha captado la atención de las redes sociales y los medios locales, no solo por la desproporción evidente entre ambos automóviles, sino también por la forma en que se desarrolló la situación. Lo terminó arrastrando durante varios metros como si se tratara de un paquete y no de un vehículo con una persona dentro sin poder controlar su pequeño automóvil.
El video del accidente entre el Mercedes-Benz y el Citröen
El Citroën Ami es conocido por ser uno de los vehículos más pequeños y ligeros en el mercado. Diseñado principalmente para desplazamientos urbanos, este coche eléctrico de apenas 2.41 metros de largo y 485 kg, es ideal para moverse en calles congestionadas y aparcar en espacios reducidos. Sin embargo, en esta ocasión, sus modestas dimensiones jugaron en su contra.
El Mercedes-Benz Actros, un gigante de la carretera diseñado para transportar toneladas de carga en largas distancias, literalmente tomó al Ami como un coche de juguete, arrastrándolo sin siquiera darse cuenta de su presencia. Las imágenes captadas por cámaras de seguridad en Hatay, Turquía, muestran el momento exacto en que el Actros comienza a arrastrar al Citroën Ami, que circulaba en la misma dirección. Sin señales de frenado o advertencia, el camión continúa su marcha sin percatarse de que el pequeño coche eléctrico ha quedado atrapado en la parte trasera.
Salieron los dos vehículos sin ningún golpe
Lo más asombroso de este incidente es que, a pesar de haber sido arrastrado varios metros, ni el Citroën Ami ni el Mercedes-Benz Actros sufrieron daños significativos. Aunque el Ami parecía una hoja atrapada en una tormenta, su carrocería y estructura básica resistieron el trayecto, lo cual es un testimonio inesperado de la durabilidad de este pequeño vehículo eléctrico. El Actros, por otro lado, ni siquiera presentó rasguños, lo cual no es sorprendente considerando su robusta construcción diseñada para soportar el rigor de la carretera.
Este peculiar accidente no solo ha desatado una ola de memes y comentarios humorísticos en las redes sociales, sino que también ha abierto un debate sobre la seguridad de los microcoches como el Citroën Ami cuando comparten las carreteras con vehículos mucho más grandes. Aunque son perfectos para los entornos urbanos, las limitaciones en tamaño y potencia de estos microcoches los hacen vulnerables en ciertas situaciones de tráfico, especialmente cuando interactúan con camiones pesados.
