El verano está dejando temperaturas que baten récords en buena parte de España, con olas de calor que no solo afectan al día a día, sino que también condicionan la seguridad en la carretera. Con el asfalto alcanzando más de 60 grados en algunos tramos y los vehículos sometidos a un sobreesfuerzo constante, la conducción en estos días se convierte en todo un reto.
No hablamos únicamente de largas travesías vacacionales: autónomos, profesionales del transporte y cualquier persona que utiliza su coche para desplazarse al trabajo deben enfrentarse a un enemigo invisible, el calor extremo. Por eso, resulta imprescindible adoptar una serie de hábitos y precauciones que permitan mantener tanto al vehículo como al conductor en las mejores condiciones posibles.
8Cuidado al aparcar y protege tu vehículo
Un coche estacionado al sol durante horas puede convertirse en un auténtico horno. El interior puede superar los 70 grados, lo que no solo afecta a la comodidad al volver a arrancar, sino también a la electrónica, plásticos y tapicería del vehículo. Por eso, siempre que sea posible, conviene buscar sombra o utilizar parasoles.
Además, ventilar el coche antes de ponerse en marcha reduce el esfuerzo del aire acondicionado y ayuda a mantener un ambiente más saludable dentro del habitáculo. Son pequeños hábitos que prolongan la vida útil del vehículo y aumentan la seguridad de sus ocupantes.








