El verano está dejando temperaturas que baten récords en buena parte de España, con olas de calor que no solo afectan al día a día, sino que también condicionan la seguridad en la carretera. Con el asfalto alcanzando más de 60 grados en algunos tramos y los vehículos sometidos a un sobreesfuerzo constante, la conducción en estos días se convierte en todo un reto.
No hablamos únicamente de largas travesías vacacionales: autónomos, profesionales del transporte y cualquier persona que utiliza su coche para desplazarse al trabajo deben enfrentarse a un enemigo invisible, el calor extremo. Por eso, resulta imprescindible adoptar una serie de hábitos y precauciones que permitan mantener tanto al vehículo como al conductor en las mejores condiciones posibles.
6Alimentación ligera e hidratación constante
El calor y las comidas copiosas no son una buena combinación. Antes de viajar, es recomendable optar por comidas ligeras que no provoquen pesadez ni somnolencia. Además, mantenerse hidratado durante todo el trayecto es fundamental para evitar mareos, bajadas de tensión o falta de concentración.
Lo ideal es llevar siempre una botella de agua fresca en el coche y hacer pequeños sorbos de manera constante. Evitar bebidas alcohólicas y con exceso de azúcar es otro consejo clave, ya que en condiciones de calor pueden acelerar la deshidratación.
